El fomento de las casas de cultivo rústicas se afianza en Sancti Spíritus como una forma factible de producción de hortalizas durante todo el año, estrategia que aprovecha el Programa de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar en el territorio para la obtención de posturas, incrementar los rendimientos de algunos cultivos y mantener la disponibilidad de hortalizas en los meses de verano.
Durante el período estival, la incidencia directa del sol y otras variables del clima restringen el desarrollo de los vegetales, fundamentalmente los de hojas, acción que se modifica al emplear la modalidad de cultivo protegido porque permite regular la radiación solar, el agua y el viento, por tanto mantener la producción, explicó Onelquis Gutiérrez Nodarse, al frente del referido Programa en la central provincia.
La especialista señaló que ya se obtienen los primeros resultados en las diez casas rústicas que se encuentran en explotación en la geografía espirituana, concentradas en los municipios de Sancti Spíritus, Yaguajay y Trinidad y agregó que se prevé la construcción de otras nueve en áreas del organopónico Celia Sánchez, conocido también como El Gigante ubicado en la ciudad cabecera.
Gutiérrez Nodarse aclaró que se denominan casas de cultivo rústicas porque para su edificación se utilizan recursos locales, principalmente, los sostenes y la estructura que es de madera, a la que se incorpora la tecnología de trecho.
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