A la ciudad de Cienfuegos le cantó Benny Moré, el Bárbaro del Ritmo. Muchos poetas le han dedicado bellas creaciones en las que resaltan los encantos de sus plazas, calles y avenidas.
No es reiterativo afirmar que Cienfuegos encanta, y que resulta difícil la retirada después de unas horas o días de estancia.
Cienfuegos es más que canción y bahía. Es arquitectura singular, limpieza notable, edificios emblemáticos muy bien restaurados… Es el parque Martí, sitio fundacional; el teatro Tomás Terry, la Catedral Católica, el Palacio Ferrer, el Bulevar, el Paseo del Prado más largo de Cuba, el Palacio de Valle… Y es el parque José González Guerra con una estatua ecuestre del valeroso patriota, terminado recientemente.
Cienfuegos es valentía demostrada por aquellos revolucionarios que el 5 de Septiembre de 1957 se levantaron en armas contra el gobierno asesino de Fulgencio Batista.
Y es la cuna de intelectuales y revolucionarios de la talla de Carlos Rafael Rodríguez. Y es su gente, sencilla, aunque orgullosa de tener una ciudad bella y muy cuidada.
Y es Don Luis Lorenzo De Clouet y Piette tomando posesión de las tierras en nombre de Su Majestad el Rey de España, ante los vecinos que le escuchaban arrodillados, el 22 de abril de 1819.
Cienfuegos es… ¡Cienfuegos!