El ministro de Justicia y Transparencia Institucional de Bolivia, Iván Lima, anunció este lunes en entrevista con el medio boliviano Red Uno, que su gobierno evalúa la posibilidad de iniciar acciones legales contra el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y que si pudieran enjuiciarlo lo llevarían a su país para que rinda cuentas por la “gravedad de sus afirmaciones y la irresponsabilidad de su informe” ante las elecciones de 2019.
Claro, se trata ahora de defender a los mismos personajes nefastos que en su momento ellos apoyaron en un Golpe de Estado que hizo retroceder al país en todos los ámbitos económicos, sociales y políticos y provocó la muerte de más de una treintena de personas y unos 300 heridos.
Definitivamente, la OEA está detrás de todo lo que beneficie a la derecha internacional y al gobierno de Estados Unidos y en esta ocasión hasta ha anunciado la conformación de una Comisión Internacional de investigación de casos de corrupción desde el último periodo del gobierno de Evo Morales hasta la actualidad, como si de veras le interesara algo que pueda beneficiar a las mayorías, y no a los intereses de unos pocos.
Al respecto, Morales recordó en su cuenta en Twitter, que Almagro nunca se pronunció por los 36 asesinatos, más de 800 heridos, 1500 detenidos ilegalmente y el centenar de perseguidos tras el golpe de Estado y que a nadie podría extrañar su defensa de Añez y los varios ministros que se encuentran en prisión preventiva, pues él también debía ser juzgado por crímenes de lesa humanidad en Bolivia. “No se puede ignorar la lucha del pueblo humilde”, dijo.
El Secretario Ejecutivo de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de America – Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA – TCP), Sacha Llorenti, aseguró también que Almagro no tiene autoridad moral para pronunciarse sobre lo que sucede en Bolivia.
“Los pueblos de nuestra América saben que él es corresponsable del golpe de Estado, cómplice de las masacres y que fue soporte del gobierno de facto de Bolivia”, afirmó.
Las declaraciones de Almagro son un nuevo atentado a la democracia: niegan la autoproclamación de Áñez, las masacres, las 1.500 detenciones ilegales, persecuciones y corrupción en pandemia, que es delito de lesa humanidad. No se puede ignorar la lucha del pueblo humilde.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) March 16, 2021
Numerosos políticos, intelectuales, dirigentes sociales y de organizaciones diversas de la región latinoamericana y caribeña, luego de la victoria electoral del Movimiento al Socialismo en las elecciones presidenciales de noviembre pasado, ya habían solicitado se juzgara a Luis Almagro por su intromisión en el proceso electoral de 2019, específicamente, por el cínico informe emitido que propició la llegada al poder de un gobierno de facto, en contra de la decisión mayoritaria de los bolivianos.
Si en algo es experto el señor Almagro y la nefasta OEA, es en estar siempre detrás de todo lo que se oponga al progresismo, al protagonismo de los pueblos, a los movimientos de izquierda y a los que no se dejen dominar desde afuera ni permitan intromisiones en sus asuntos, sobre todo si vienen de Washington. Por eso y por toda una lista de acontecimientos innombrables, sí merece ser llevado ante la justicia.