El objetivo de trabajo no. 21, aprobado en el XXI Congreso de la CTC, señala: “Desarrollar un proceso de capacitación para los dirigentes sindicales de forma integral, desde lo económico, social, político ideológico, jurídico laboral y sindical, como esencia del funcionamiento de las organizaciones de base”.
En muchos momentos se ha insistido en tan importante asunto. No obstante, queda un largo trecho por recorrer en aras de que quienes conducen el movimiento sindical en los diferentes niveles cuenten con todas las herramientas requeridas para organizar, representar y movilizar de mejor manera a los trabajadores.
Acciones concretas puestas en prácticas por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Construcción (SNTC) evidencian cuánto más puede hacerse en términos de preparación y conocimientos.
Pueden existir quienes aducen que en estos tiempos de pandemia es difícil reunir a los dirigentes para impartirles conferencias e intercambiar, con los pies bien puestos en la tierra, sobre lo que debe conocerse para que el funcionamiento sea más eficaz. Pero lo realizador por esa organización demuestra que si puede materializarse la capacitación sin descuidar el cumplimiento de las medidas higiénicas y sanitarias consideradas en los protocolos ara evitar el contagio con la COVI-19.
Lo primero es asumir e incorporar la tarea con la prioridad debida en el sistema de trabajo cotidiano y darle la prioridad que merece. Eso hizo el Secretariado Nacional del SNTC. Sus integrantes, durante un análisis, determinaron cuáles serían los temas esenciales a tratar con los dirigentes en todo el país en una primera fase intensiva.
Y la primera acción fue organizar una conferencia virtual para los principales cuadros de la organización en todo el país, en la que en un tiempo prudencial, fueron tratados aspectos imprescindibles del funcionamiento interno y otros relacionados con las principales prioridades del momento. Orientaron organizar en cada provincia encuentros similares que permitieran extender los tentáculos de la capacitación hasta los dirigentes en la base.
Así se ha realizado. En varias jornadas fueron considerados fundamentalmente, el papel del sindicato en la actualización de los Convenios Colectivos de Trabajo, la Tarea Ordenamiento y la Estrategia Económico y Social para enfrentar la crisis generada por la pandemia y propiciar el desarrollo del país.
Lo ejecutado no significa que todo esté hecho y que las posibilidades estén agotadas. Con la preparación hay que continuar, porque la realidad cambia, a tono con las circunstancias, y al sindicato le corresponde estar en el centro de las prioridades.
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