«Reiteramos la plena vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, firmada por los jefes de Estado y de Gobierno de toda la región. Un mundo de justicia, dignidad y paz es posible si prevalece la cooperación entre los Estados, se observan el Derecho Internacional y los derechos de los pueblos a la paz, el desarrollo y la justicia», declaró el canciller cubano, Bruno Rodríguez Parrilla, al intervenir en la Conferencia de Desarme.
El diplomático cubano señaló que es el escenario internacional es cada vez más peligroso y desafiante. «Más que nunca, está en riesgo la propia supervivencia humana. La paz y la seguridad internacionales se ven amenazadas por conflictos; guerras de rapiña y no convencionales; actos de agresión e intentos de cambio de régimen; y por una carrera armamentista que dilapida enormes recursos indispensables para el desarrollo sostenible de nuestros pueblos» añadió.
Apuntó que la devastadora pandemia de la COVID-19 ha mostrado la fragilidad de un mundo donde no se garantiza el acceso universal a servicios básicos de salud, «mientras se modernizan y amplían los arsenales nucleares y se fortalece su papel en doctrinas militares de defensa y seguridad, que continúan amenazando a la humanidad».
Rodríguez llamó a fortalecer el multilateralismo y el respeto irrestricto a los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho Internacional.
Asimismo, denunció que en un acto cínico e hipócrita, el 11 de enero de 2021, el gobierno del presidente Donald Trump designó a Cuba como Estado patrocinador del terrorismo, para imponer obstáculos adicionales a cualquier perspectiva de avance en las relaciones bilaterales entre ambos países.
En ese sentido, instó al nuevo gobierno a revocar esta absurda e injustificada decisión.
Cuba también urgió al foro a cumplir con su mandato de negociar tratados multilaterales en materia de desarme y atienda de manera prioritaria el desarme nuclear. Llamó a preservar los acuerdos de desarme y control de armamentos es crucial, y saludó que Rusia y Estados Unidos hayan extendido el START III.
«Preservan hoy validez las palabras del Comandante en Jefe de la Revolución Cubana Fidel Castro Ruz y cito: “Cese la filosofía del despojo y cesará la filosofía de la guerra” (fin de la cita)», concluyó Rodríguez.
Nos congratulamos por la entrada en vigor del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, un verdadero hito en los esfuerzos internacionales hacia un mundo libre de estas armas. #Cuba 🇨🇺se enorgullece de haber sido el quinto país en ratificarlo. pic.twitter.com/yOdjrr2RSr
— Cancillería de Cuba (@CubaMINREX) February 22, 2021
Cuba por el desarme, no proliferación y control de armamentos
Por Yimel Díaz Malmierca
El Segmento de Alto Nivel de la Conferencia de Desarme que este año tiene lugar de manera virtual y será moderado desde Ginebra, Suiza, contará este lunes 22 de febrero con la intervención del del canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla.
La Conferencia, reconocida como un “foro único de negociaciones multilaterales sobre desarme”, da continuidad a la primera Sesión Especial de Desarme de la Asamblea General de las Naciones Unidas en 1978. En ese espacio se han negociado instrumentos como la Convención sobre la Prohibición del Desarrollo, la Producción y el Almacenamiento de Armas Bacteriológicas (Biológicas) y Toxínicas y sobre su Destrucción; Convención sobre la Prohibición del Desarrollo, la Producción, el Almacenamiento y el empleo de Armas Químicas y sobre su Destrucción y el Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares.
La participación de Cuba en este evento se corresponde con su compromiso frente al régimen internacional de desarme, no proliferación y control de armamentos y se sustenta en el pensamiento humanista del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, luchador incansable por el desarme nuclear, quien expresó “En una guerra nuclear el daño colateral sería la vida de la humanidad”.
Entre los principios de la política exterior de la República de Cuba refrendados en la Constitución del 24 de febrero del 2019 queda claro que el país “promueve el desarme general y completo y rechaza la existencia, proliferación o uso de armas nucleares, de exterminio en masa u otras de efectos similares, así como el desarrollo y empleo de nuevas armas y de nuevas formas de hacer la guerra, como la ciberguerra, que transgreden el Derecho Internacional”.
Además, defiende el concepto de que el uso o amenaza de uso de las armas nucleares es una violación de la Carta de las Naciones Unidas y del Derecho Internacional, incluyendo el Derecho Internacional Humanitario, y no puede ser justificado bajo ningún concepto o doctrina de seguridad.
Durante la celebración por el Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares del 2 de octubre de 2020, en el contexto del 75 período de sesiones de la Asamblea General de Naciones Unidas, Cuba dejó clara su postura de que el uso de estas armas son inhumanas, inmorales, y éticamente indefendibles.