No llevan batas blancas ni producen vacunas en centros biotecnológicos; sin embargo, su aporte es fundamental en el enfrentamiento a la COVID-19, enfermedad que, como sabemos, requiere de estrictos protocolos de higiene para evitar el contagio.
Los trabajadores de servicios comunales también cumplen tareas difíciles, asociadas a las medidas del Consejo de Defensa Municipal para cortar la trasmisión del nuevo coronavirus en la Isla de la Juventud; entre ellas, la desinfección del bulevar José Martí y la recogida de desechos en áreas en cuarentena.
Sin embargo, a pesar de la disposición de los obreros para sanear la calle principal de Nueva Gerona o tocar puerta a puerta en las zonas rojas para recoger los residuos domésticos, existen limitaciones materiales para el buen desempeño de los trabajadores y ofrecer un mejor servicio a los pineros.
¿Sin miedo a la Covid-19?
Mario Quesada López integra una de las brigadas de limpieza del bulevar de la ciudad capital de la Isla de la Juventud. Trabaja en Comunales desde 1999. Desde la reconstrucción del paseo Martí, hace más de cinco años, ha permanecido allí. Incluso, llegó a dirigir uno de los equipos de higienización.
Pasadas las nueve de la noche, cuando no hay pineros fuera de casa, Mario Quesada y el resto de los trabajadores comienzan la desinfección de puertas, bancos y otros sitios donde puede permanecer el Sars-CoV-2. Además, concluyen su habitual limpieza del suelo de mármol y ladrillos rojos.
“Lo hacemos pensando en nuestro pueblo. En esta etapa hay un mayor riesgo de contagio”, afirmó. Sin embargo, expuso que aún no se ha solucionado un viejo reclamo: “nuestros medios de trabajo son deficientes, sobre todo, los guantes y las colchas”, dijo.
Mario confesó que usa guantes remendados por él mismo y que las frazadas para limpiar el piso las consiguió una técnica de higiene por iniciativa propia. Sus colegas coincidieron con él y mostraron las colchas agujereadas por doquier, dañadas por la irregular superficie de los ladrillos.
“Aunque usemos nasobuco y adoptemos otras medidas, estamos expuestos al contagio al emplear medios de limpieza en mal estado. Por aquí pasan cientos de personas y el Covid-19 no tiene rostro”, advirtió alarmado.
Los trabajadores de servicios comunales también llegan a las áreas en cuarentena, recogen residuos de los centros de aislamiento y del Hospital General Docente Héroes del Baire.
Recursos limitados
Santiago Rojas Martínez, director de la Empresa Municipal de Servicios Comunales, explicó que esa entidad sufre un déficit de recursos necesarios para mantener la higiene en la ciudad de Nueva Gerona y otros poblados del municipio.
El funcionario hizo énfasis en el parque automotor: “De 27 vehículos, solo funcionan ocho. De estos, los cinco vinculados a la prestación de nuestros servicios presentan dificultades técnicas. Por tanto, es imposible cumplir todas las misiones”, dijo.
Rojas Martínez identificó la falta de neumáticos, la rotura de motores de arranques y de las baterías como las principales causas de la crítica situación. Además, comentó que dentro de 15 días tendrá que paralizarse el único camión con sistema Ampirroll. Ese vehículo es indispensable para trasladar los vagones destinados a acumular desechos, incluidos los de las zonas en cuarentena.
“Con esta situación hemos priorizado los consejos populares del centro de la ciudad, pues allí existe mayor población, pero eso condiciona que otras zonas hayan dejado de recibir nuestros servicios o lleguemos con una menor frecuencia”, aseguró el director.
Ante esta realidad, el Consejo de Defensa orientó a varias entidades apoyar en la recolección de desechos luego del horario laboral. Otro paliativo a esta problemática será la compra de neumáticos, tras la aprobación de un presupuesto con ese fin y la llegada al municipio de un camión colector de segunda mano.
Sin embargo, continúa sin solución el reclamo de los trabajadores de comunales que limpian el bulevar José Martí de Nueva Gerona. Con el rebrote de la Covid-19 en la Isla de la Juventud esta labor se vuelve más peligrosa que de costumbre.