Regla Angulo Pardo, Viceministra de Salud Pública, al frente de la comisión ministerial que apoya el enfrentamiento y control de la COVID-19 en Guantánamo, llamó a «una correcta pesquisa comunitaria, vía eficaz para cortar la dispersión y transmisión de la COVID-19» que desde inicios de este año mantiene en alarma sanitaria a la oriental provincia cubana.
La también médico internacionalista destacó la víspera en reunión del Consejo de Defensa Provincial, que es imprescindible el rigor de las pesquisas realizadas por estudiantes de ciencias médicas con sus profesores, junto al personal de Atención Primaria, puesto que de ello depende detectar rápidamente y aislar a personas con sintomatologías respiratorias, pacientes sospechosos de portar el virus, lo cual a su vez posibilitará bajar la morbilidad de los pacientes graves y críticos, al ser atendidos de forma oportuna.
Enfatizó que no se puede permitir en estos momentos «disminuir el número de tests de antígeno y PCR que se realicen ni las visitas a los hogares, priorizando a las personas vulnerables», mientras resaltó «la necesidad de que las áreas y los grupos básicos de salud funcionen bien, siendo reales en el por ciento de las pesquisas que se informan, para lograr aislar a los contactos de casos positivos».
La vicetitular del Ministerio de Salud Pública en Cuba instó a «elevar la responsabilidad social, institucional y personal en el enfrentamiento a la pandemia» en el territorio, donde unos 105 casos están asociados a eventos institucionales, en su mayoría la comunidad Joa en el municipio Baracoa, la Universidad de Ciencias Médicas y el Hogar de Ancianos Caridad Jaca.
Aumentar el rigor de las encuestas epidemiológicas, como prioridad de trabajo de los equipos básicos de las áreas de salud también fue indicación de Angulo Pardo en Guantánamo donde cinco de los diez municipios presentan focos activos, entre los más de 119 existentes.
En el actual rebrote de la enfermedad resultaron positivos más de 2 mil 862 guantanameros y murieron ocho personas en el territorio, en tanto el peligro de trasmisión crece al ser esta la segunda provincia de mayor tasa de incidencia con 253 por cada 100 mil habitantes.
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