En la tarde del pasado sábado 6 de febrero falleció el destacado jurista Dr. Francisco Guillén Landrián, destacado especialista del Derecho Laboral cubano y miembro fundador de la Unión Nacional de Jurista de Cuba, según informó la Junta Directiva.
De origen camagüeyano e hijo de una ama de casa, se convirtió en jurista por voluntad propia. Como reconoció en alguna ocasión, no pensaba estudiar Derecho, sino Medicina. Sin embargo, cuando acudió a la Facultad de Ciencias Médicas, que estaba en aquella época en 25, entre J y K (Vedado), el ambiente no le agradó y entonces decidió no hacerlo, por lo que matriculó en la Facultad de Derecho.
Derecho no fue ni lo primero ni lo único que estudió. Concluido el bachillerato, en La Habana, había tenido que regresar a Camagüey al estar cerrada la Universidad. Allá estudió dos años de Periodismo. En esa provincia trabajó en la Emisora de Televisión Experimental y cuando se reabrió la Universidad, en 1960, fue que comenzó a estudiar la carrera de Derecho. Tres años le bastaron para graduarse, de los cuales sólo uno fue con asistencia a clases.
Cuando cursaba el segundo año de la carrera, sin estar graduado aún y ante la carencia de profesionales universitarios y mucho más de especialistas en Derecho Laboral comenzó a trabajar en el entonces MINTRAB.
Ya para el segundo curso, solo venía a la Facultad a examinarse, pues había empezado a trabajar, a partir de que varios funcionarios del Ministerio del Trabajo acudieron a la Facultad de Derecho, para captar jóvenes estudiantes
Fue así como, desde muy joven, trabajó en la elaboración e implementación del sistema salarial, al principio de la Revolución.
En esos momentos, aunque se pudo contar con asesoramiento de especialistas soviéticos, el joven –ya recién graduado de Derecho-, tuvo que afrontar un proceso muy complejo, porque exigía explicar sus nuevos derechos a los trabajadores, reunidos en asamblea, para someterlos a aprobación en los centros de trabajo.
Desde entonces fue el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social el lugar al que más tiempo dedicó en su vida, hasta la merecida jubilación que disfrutaba en el momento de su fallecimiento.
Dentro del seno de la Unión Nacional de Juristas de Cuba (UNJC) fue miembro de la Junta Directiva y del Consejo Nacional en varias oportunidades, así como fundador y Vicepresidente de la Sociedad Cubana de Derecho Laboral y Seguridad Social.
Como Profesor Titular adjunto de la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, desarrolló una amplia labor investigativa. Fue autor de dos libros, entre los cuales está La Codificación del Derecho Laboral en Cuba (1986), así como de decenas de artículos en revistas especializadas, y coautor de varios textos de la bibliografía de pregrado de la asignatura de Derecho Laboral.
En ocasión de efectuarse el XI Encuentro Internacional de Abogados Laboralistas, celebrado en Cuba, fue reconocido con la condición de Juristas “Por la Obra de la Vida”, una de las tantas distinciones que ha recibido.
Guillén deja un legado que forma parte del Derecho del Trabajo de la Revolución.
A nombre de la Unión Nacional de Juristas de Cuba, llegue a sus familiares y colegas, especialmente a los dedicados al Derecho Laboral, nuestras sentidas condolencias.
