Con el propósito de incrementar y diversificar la producción de alimentos, 169 módulos pecuarios funcionan ya en la occidental provincia de Matanzas, una de las alternativas de mayor relevancia como respuesta a los efectos de la COVID-19 y al logro de mayor soberanía alimentaria.
Carlos Luis Naranjo Suárez, delegado del Ministerio de la Agricultura, manifestó a Trabajadores que las mejores experiencias las aportan las bases productivas 26 de Julio y Gispert, ambas en el municipio de Colón, y la Empresa Agroforestal de Matanzas (AFM), actividad donde también muestran alentadoras señales en la acuicultura en y algunos productores individuales.
Dirigida de conjunto con otros programas al suministro estable de comida, específicamente de proteínas, la opción de los módulos pecuarios echa firmes raíces en la finca agroforestal El Palmito, en el poblado de Guanábana, en las afueras de la ciudad de Matanzas.
Creado el año pasado en apenas 50 días, el asentamiento de siete naves trasciende ya por sus expendios de carne de carnero, de conejo, de pollo campero y huevos de gallina, así como también por la venta de precebas hembras de la variante capa oscura, clase de cerdo calificada como más resistente y mejor adaptada al clima.
Jorge Díaz Mirabal, director general de la AFM, precisó que esta variante de cochinos puede prescindir perfectamente de los piensos de origen industrial, hoy muy limitados en el país, y basar su alimentación en soluciones como el yogur de yuca.
Díaz Mirabal ponderó la experiencia de la persona a cargo de la finca, un experimentado productor que habita allí con su esposa, en una casa creada para su permanencia en un sitio convertido en referencia nacional, tal y como lo han reconocido los más altos directivos del Ministerio de la Agricultura.
Manifestó que los éxitos de este módulo pecuario mucho se deben al sostenido plan de siembra de yuca, maíz, boniato, morera y king grass impulsado por la empresa, porque solo así se puede alcanzar sostenibilidad, señaló.
A su juicio, la iniciativa constituye una forma rápida de cumplir con el programa de los 5 kilogramos de carne por habitante que promueve el Estado cubano, por lo que está llamada a perpetuarse en el tiempo, consideró.
Raidel Cabello Valle, secretario general del Sindicato Provincial de Trabajadores Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros, ponderó los óptimos saldos que viene alcanzando el módulo de El Palmito, muestra del buen hacer de la AFM, empresa considerada la mejor de su tipo en el país y merecedora de la condición en Victoria, movimiento instituido en Matanzas para reconocer los mejores desempeños en la producción y los servicios.
Pese al avance de los módulos pecuarios en Matanzas, la opción sigue lejos de satisfacer los 5 kilogramos por por persona , según estadísticas difundidas por la delegación provincia de la Agricultura.