“En Nuevitas, como en el resto del país, hay dificultades con el transporte público”, señala Gladys, una vecina de ese municipio.
“Una de las formas de aliviar esta situación es que la población tenga la posibilidad de utilizar otro medio de transporte y no solo los ómnibus.
“Resulta que existen cocheros autorizados en esta gestión no estatal, pero hay otros que realizan la actividad ilegalmente, aunque muchos lo hacen porque no se están autorizando las licencias.
“¿Cuáles son las razones? El municipio recoge su impuesto, el cochero satisface sus necesidades y, además, es un servicio de cero consumo de combustible; además no afecta el medio ambiente.
“Ser cochero es un trabajo más en nuestra sociedad y da la posibilidad de crearle un vínculo a quien lo ejerza.
“Ni el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, ni Tránsito del municipio dan respuesta oportuna sobre el asunto. Simplemente no se está autorizando.
“¿Entonces, de quién depende la solución?”.