Las autoridades británicas informaron este lunes sobre la detección en el país de una nueva variante del coronavirus que puede ser «hasta un 70 % más transmisible» que la cepa original de la enfermedad, según el primer ministro Boris Johnson.
Debido a la rápida propagación de la nueva cepa Johnson anunció nuevas restricciones en el país para el período de las fiestas navideñas, mientras que varios países decidieron prohibir temporalmente vuelos con el Reino Unido y otros Estados.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) señaló este domingo que una variante del COVID-19 similar a la del Reino Unido también fue encontrada en Países Bajos, Dinamarca y Australia. Anteriormente, se informó sobre una mutación similar identificada en Sudáfrica.
¿Qué se sabe de esta nueva cepa del coronavirus? ¿Es posible que no responda a una vacuna?
¿Cómo y cuándo surgió la nueva cepa?
La nueva variante del coronavirus —denominada VUI-202012/01, donde VUI corresponde a ‘variante bajo investigación’— se detectó por primera vez a finales de septiembre, y se caracteriza por un conjunto de 17 cambios o mutaciones, recoge The Daily Telegraph.
Hasta el 13 de diciembre, se confirmaron un total de 1.108 casos con esta nueva variante, predominantemente en el sur y este del Reino Unido, aunque también se registran contagios en la capital, Londres. No hay evidencia de que se haya importado del extranjero, por lo que es probable que haya evolucionado dentro del país.
Actualmente, los científicos están cultivando la nueva cepa en laboratorio para ver cómo responde. Esto incluye analizar si produce la misma respuesta de anticuerpos y cómo reacciona a la vacuna. Este proceso podría tomar hasta dos semanas.
Asimismo, los funcionarios de salud están llevando a cabo una secuenciación aleatoria de muestras de casos positivos en todo el país con el fin de estudiar su propagación y elaborar mapas regionales de su prevalencia.
¿En qué se diferencia de la cepa original?
Las autoridades británicas señalan que la nueva variante puede hacer que el virus se vuelva más infeccioso y se propague más fácilmente entre la población. Este sábado, el primer ministro Boris Johnson anunció que la cepa puede ser «hasta un 70 % más transmisible» que la original.
«La nueva cepa de COVID-19 es un motivo real de preocupación y precaución adicional. Se están realizando investigaciones para comprender más, pero actuar con urgencia ahora es fundamental», declaró el asesor médico jefe del Gobierno, Chris Whitty, citado por el periódico Evening Standard.
Por su parte, el secretario de Salud del Reino Unido, Matt Hancock, afirmó que la nueva cepa de COVID-19 detectada recientemente está «fuera de control», mientras, destacó la importancia de las restricciones adoptadas para contener su propagación.
Hancock declaró que controlar esta nueva variante del virus es «más importante ahora que nunca», e indicó que el número de nuevos casos «se disparó» en los últimos días. En ese contexto, sugirió que las restricciones para detener su propagación podrían estar en vigor durante meses.
¿Puede provocar más casos graves de COVID-19?
Actualmente no hay datos que sugieran que la variante es más peligrosa o pueda resultar en una mayor cantidad de decesos. Sin embargo, si la nueva cepa se propaga más fácilmente, es posible que más personas terminen infectadas en un período de tiempo más corto.
«Si la nueva variante tuviera un gran impacto en la gravedad de la enfermedad, a estas alturas ya lo habríamos visto», señaló Ewan Birney, subdirector general del Laboratorio Europeo de Biología Molecular y director adjunto de su Instituto Europeo de Bioinformática en Cambridge, recoge The Guardian.
«Los casos hospitalarios como una proporción del número de infecciones se habrían disparado o disminuido drásticamente. Ninguno de los dos casos ha sucedido, por lo que podemos concluir que es probable que el impacto en el número de casos graves sea modesto: un poco más o un poco menos», dijo Birney.
¿Puede que no responda a la vacuna?
Los expertos señalan que es «poco probable» que la mutación no responda a una vacuna, ya que los fármacos se han probado con muchas variantes del virus en circulación y producen anticuerpos contra varias regiones de la proteína espiga.
«No hay evidencia actual que sugiera que la nueva cepa cause una mayor tasa de mortalidad o que afecte a las vacunas y tratamientos, aunque se está trabajando urgentemente para confirmarlo», declaró Whitty.
«Hay muchas razones para pensar que las vacunas seguirán funcionando contra esta nueva cepa, aunque obviamente eso debe probarse a fondo», subrayó, por su parte, Birney.
¿Qué dice la OMS?
La OMS afirmó que está «en estrecho contacto» con las autoridades del Reino Unido respecto a la nueva mutación del coronavirus.
Previamente, desde el organismo declararon que no hay datos que muestren que la mutación del SARS-CoV-2 identificada en el Reino Unido se distinga en su comportamiento de otras cepas del virus.
La jefa de la unidad de enfermedades emergentes del organismo, Maria Van Kerkhove, señaló que los médicos continúan evaluando las características de la mutación e indicó que la nueva cepa británica podría estar relacionada con las descubiertas recientemente en granjas de visones en varios países. (Tomado de RT)