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La hoja de ruta que nos traza el ALBA –TCP

Han pasado solo 16 de años, mucho se ha hecho, mucho se ha avanzado, se han estrechado lazos ya indisolubles y se ha demostrado cuánto se puede obrar en pos del bienestar de nuestros pueblos cuando por encima de todo, está la voluntad y el afán por el bien común, por compartir lo que se tiene; pero aún queda mucho camino por recorrer enfrentando obstáculos y amenazas que no son pocos.

 

 

Fueron estos los sentimientos e ideas más compartidas por los jefes de Estado y de gobierno, los cancilleres del ALBA –TCP reunidos en la XVIII Cumbre de esta Alianza, realizada este lunes de forma virtual y en la que se renovó el compromiso de sus Estados miembros con el fortalecimiento de este mecanismo de concertación política fundado por el Comandante en Jefe Hugo Chávez Frías y el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.

En la Declaración final del Encuentro, se reivindica el ideario de Bolívar, Martí, San Martín, Sucre, O´ Higgins, Petión, Morazán, Sandino, Maurice Bishop, Garvey, Túpac Katari, Bartolina Sisa, Chatoyer y otros próceres de la independencia latinoamericana y caribeña, “como memoria histórica y cultural que nos enlazan en un instrumento de unidad y desarrollo de nuestros pueblos y gobiernos, basados en el diálogo, la cooperación, la solidaridad, la complementariedad, la justicia, y reivindicación de la soberanía e independencia”

Se ratifica el compromiso con la integración genuinamente latinoamericana y caribeña, que nos permita enfrentar unidos las ansias de dominación imperialista y las amenazas crecientes a la paz y la estabilidad regionales, al multilateralismo y a los principios del Derecho Internacional, incluidos el respeto a la libre determinación de los pueblos, a la soberanía, a la integridad territorial, a la no injerencia en los asuntos internos de los Estados.

Se abogó también por la prohibición de la amenaza y el uso de la fuerza y por la solución pacífica de controversias, refrendados en la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, resaltando la necesidad de fortalecer la Comunidad de Estados Latinoamericanos y caribeños (CELAC) como mecanismo genuino de concertación política regional basado en el principio de unidad en la diversidad, al vez que se reconoció la labor de la Presidencia Pro Témpore de México para revitalizar la Comunidad con el compromiso de continuar apoyando su gestión.

En el documento final se reconoce que los resultados recientes de nuestros pueblos en elecciones democráticas como las de Bolivia, las parlamentarias en Venezuela y las de los primeros ministros de San Kitts y Nevis y en San Vicente y las Granadinas, revitalizan la Alianza y “demuestran que solo con la unidad del pueblo es posible enfrentar la injerencia y revertir los golpes de Estado promovidos y financiados por el imperio en la región, en contubernio con las oligarquías locales”.

Asimismo, se rechaza la imposición de medidas coercitivas unilaterales contra la República Bolivariana de Venezuela, que violan el Derecho Internacional y las disposiciones de la Carta de las Naciones Unidas y representan un castigo colectivo al pueblo venezolano, ocasionando indecibles sufrimientos de forma indiscriminada a toda la población; se condenaron las pretensiones hegemónicas de los EE.UU. en su afán por revivir la Doctrina Monroe y  los intentos de revivir el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) para atacar la patria de Bolivar y Chavez, lo cual puede tener un terrible impacto para la paz y seguridad de la región.

De igual forma, se ratifica el apoyo incondicional al gobierno sandinista, al presidente Daniel Ortega Saavedra y al pueblo de Nicaragua en su decisión de continuar defendiendo la soberanía, la paz y los notables avances sociales, económicos, de seguridad y de unidad nacional alcanzados y se condenan los ataques y reiterados intentos desestabilizadores contra el gobierno legítimo de pa tierra de Sandino y las medidas coercitivas unilaterales y acciones desestabilizadoras para intentar interferir en sus asuntos internos. Reafirmamos pleno apoyo a los países caribeños en su reclamo de compensación por el genocidio de la población nativa y los horrores de la esclavitud y la trata trasatlántica.

¿Quién es el nuevo Secretario Ejecutivo del ALBA – TCP?

 

Una vez más, los miembros del ALBA-TCP ratificaron el derecho de los países del Caribe a recibir un tratamiento justo, especial y diferenciado, rechazó las medidas adoptadas contra estos al considerarlos jurisdicciones no cooperativas exhortó a revisar los criterios de graduación que los califican como “países de renta media”, lo que dificulta su acceso al crédito y a la cooperación internacional. “El Caribe encontrará siempre en el ALBA-TCP una plataforma de cooperación y complementariedad para la defensa y promoción de sus justos reclamos y reparaciones”, ratificaron.

En el contexto de la pandemia de la COVID- 19, manifestaron su pesar por las víctimas mortales que esta ha causado en el mundo, expresaron preocupación por el devastador impacto socioeconómico y la crisis multidimensional generada y abogaron por una respuesta coordinada, solidaria y mancomunada que garantice la recuperación inclusiva y resiliente de nuestras economías y nos permita afianzar el desarrollo sostenible, así como la erradicación de la pobreza. En este sentido, reiteraron el papel central del Estado en la aplicación de estrategias nacionales que fortalezcan los sistemas de salud y protección social y permitan el acceso universal en condiciones equitativas y asequibles a las vacunas y tratamientos desarrollados para el tratamiento.

En la XVIII Cumbre del ALBA –TCP se reconoció el liderazgo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el proceso de concientización, prevención y combate a la pandemia y el gigantesco esfuerzo de los profesionales de la salud, científicos y el personal humanitario para combatirla en distintas partes del mundo, en particular la contribución de Cuba a pesar de las complejas circunstancias impuestas por el recrudecimiento del bloqueo económico, comercial y financiero de los EE.UU. y la campaña del gobierno de ese país para desacreditar y sabotear la cooperación médica internacional que se ofrece en decenas de países y que ha beneficiado a millones de personas. Igualmente, destacó la labor altruista del Contingente Médico Cubano Henry Reeve y su aporte al enfrentamiento del coronavirus y se precisó el apoyo a las numerosas iniciativas para registrar, formalmente, la candidatura de este Contingente al Premio Nobel de la Paz 2021.

Empeño de esta organización será en lo adelante el desarrollo de la zona económica complementaria ALBA-Petrocaribe, como un verdadero modelo de desarrollo productivo y tecnológico, fundamentado en los valores de la Alianza y en los principios del Tratado de Comercio de los Pueblos, ratificándose el compromiso por la construcción de un modelo alternativo de soberanía económica, expresado en una Nueva Arquitectura Financiera que permita  consolidar un sistema de intercambio y cooperación recíproco, solidario, participativo y complementario, que fortalezca nuestra libertad económica y comercial.

Resaltaron el imperativo de condonar la deuda externa que asfixia a los países subdesarrollados o adoptar medidas para su alivio, suspensión o reestructuración, especialmente en condiciones de pandemia y se comprometieropn a redoblar esfuerzos para desarrollar un sistema de intercambio comercial basado en monedas locales, así como en las oportunidades que ofrecen las nuevas tecnologías explorando fórmulas para el uso de los criptoactivos, con el fin de fomentar la independencia económica y financiera de nuestros pueblos a partir del sistema de compensación monetaria del SUCRE, así como la criptomoneda “Petro” en la República Bolivariana de Venezuela.

Se reiteró además,  la voluntad de continuar trabajando y cooperando en la lucha contra del cambio climático, rescatar la participación y presencia plena de los movimientos sociales, de solidaridad y sectores populares en nuestro proceso integracionista, para avanzar en la construcción de sociedades incluyentes, culturalmente diversas y ambientalmente responsables, que excluya la explotación del ser humano; asi como trabajar junto a los pueblos indígenas en la implementación de medidas para la preservación, transmisión y desarrollo de las lenguas indígenas a fin de resguardar el derecho a revitalizar, utilizar, fomentar y transmitir a las generaciones futuras sus historias, idiomas, tradiciones orales, filosofías, sistemas de escritura y literaturas.

El ALBA-TCP reiteró su apoyo con el justo e histórico reclamo del Estado Plurinacional de Bolivia sobre su derecho a una salida al mar con soberanía y su condena al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones, incluidos aquellos casos en los que los Estados están directa o indirectamente involucrados y se denunció la utilización de estrategias de guerra no convencional para atacar e inhabilitar a los gobiernos y líderes progresistas de la región a través de procesos judiciales políticamente motivados (lawfare), la manipulación con fines desestabilizadores de los derechos humanos, la campaña de propaganda y desinformación, el uso malicioso de las tecnologías de la información y la comunicación, los ataques cibernéticos, y otros.

Un Plan de Trabajo Post-Pandemia ALBA-TCP 2021 fue aprobado este lunes 14 de diciembre por los Estados miembros del ALBA-TCP en el que se llama a reactivar los distintos distintos Consejos desde principios del año 2021 para avanzar en una agenda concreta de acciones y se  encargó a la Secretaría Ejecutiva de su seguimiento, consulta y cumplimiento en beneficio del fortalecimiento de la Alianza.

 

 

 

“Afirmamos nuestra determinación de seguir avanzando y profundizando en su fortalecimiento como una alternativa político-estratégica de integración latino-caribeña, contra hegemónica, democrática, incluyente y participativa.

Recordamos que los países del ALBA-TCP desde su fundación estamos en sesión permanente de consulta, para defender la independencia, soberanía y libre autodeterminación de sus pueblos”, concluye la declaración final; sin dudas una hoja de ruta que definirá las nuevas tareas y desafíos de este importante mecanismo de integración regional sobre el cual se vuelven las miradas del mundo cuando se alzan las banderas de solidaridad  en pos de las causas justas del mundo.

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