El Ballet Nacional de Cuba presentará desde el jueves un programa combinado en el Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso. Será el regreso, después de casi un año, a su más emblemático escenario.
A la inmensa Alicia Alonso se dedicarán estas funciones, a unas semanas de que se cumpla el centenario de la más importante bailarina de este continente.
Pero la agrupación también recordará a Fidel Castro, el hombre que apoyó y acompañó a la compañía desde el primer año de la Revolución triunfante. A Fidel, a cuatro años de su desaparición física, le estará consagrada la función del jueves.
El programa de esta temporada ofrece un panorama de la creación de la compañía en las últimas décadas. No faltarán verdaderos clásicos de la coreografía nacional, como el célebre Muñecos, de Alberto Méndez, junto a joyas de la gran tradición universal, como el Grand Pas de Quatre.
Entre los protagonistas, jóvenes figuras del elenco, muy a tono con la pretensión de la directora, Viengsay Valdés, de estimular a bailarines emergentes.
Renovación, pero siempre en diálogo con el patrimonio de tantos años. No en vano la función del domingo estará dedicada al maestro Alberto Méndez, que ha sido, y es, uno de los principales coreógrafos de la compañía.
Con estas presentaciones, el Ballet Nacional de Cuba continúa su programa en homenaje a Alicia Alonso en su centenario. Por la contingencia sanitaria hubo que aplazar incluso el Festival Internacional de Ballet. Pero el año que viene estará dedicado a esta gran artista, referente indiscutible de la danza universal, orgullo de Cuba.
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