«No hubo realmente hecho significativo en el quehacer de la Revolución y su líder histórico que no impresionara la sensibilidad de Nicolás Guillén y que no dejase constancia de ello en su prosa o en su poesía…».
Buenos días Fidel (Ediciones Sensemayá, Colección Fidel entre nosotros, La Habana, 2016, 128 pp) es el título de esa obra, en que aparecen textos de Nicolás Guillén relacionados con la acción y el pensamiento del líder de la Revolución Cubana.
Con selección de la investigadora y ensayista Denia García Ronda, se abre el volumen con el poema «Canta el sinsonte en el Turquino», originalmente publicado en el suplemento del diario Hoy, el 29 de junio de 1960.
Otro poema, titulado «De esta manera», aparecido en la revista Cuba, en octubre de 1968, a propósito de la conmemoración del centenario del inicio de la luchas independentista en la isla, cierra la entrega.
Son varios los poemas que se reproducen en este libro, entre ellos «Fidel», perteneciente a Por el mar de Las Antillas anda un barco de papel, libro para niños publicado en 1977:
Fidel,
el nombre de Cuba lleva
por siempre en el pecho fiel.
Fidel,
fue quien levantó la gleba
hasta el mirto y el laurel.
Fidel,
el que alzó una patria nueva
sin odio, crimen, ni hiel.
Fidel.
En Buenos días Fidel aparecen, asimismo, textos en prosa –fundamentalmente artículos de publicaciones periódicas–, que indagan, comentan, reflexionan, sobre momentos del proceso revolucionario liderado por Fidel.
Revelador resulta uno de esos textos, «Una revisión entre otras», incluido el 29 de marzo de 1959 en las páginas del periódico Hoy, en que el autor analiza un tema de incuestionable trascendencia:
Como se sabe ya por sus afirmaciones públicas, Fidel Castro considera urgente una profunda revisión de la historia de Cuba. Él piensa, con razón, que un proceso revolucionario como el que atravesamos, ha de irse a la raíz de nuestras lacras cívicas y extirparlas, si el mal no tiene remedio. Y si lo tiene, aplicarlo sin contemplaciones, por cruel que ese remedio sea.
(…)
Échase a andar así una política revolucionaria nacional cuyas raíces se afincan en el humus de la prédica martiana. Una política que no se aplicó nunca por nuestros hombres de mando y gobierno, desde el nacimiento del nuevo Estado, hace sesenta años, hasta nuestros días.
Poeta y periodista, Nicolás Guillén (Camagüey, 1902-La Habana, 1989), galardonado, entre otros reconocimientos, con el Premio Nacional de Literatura, es una voz imprescindible de la lírica cubana e hispanoamericana del siglo XX.
Poemarios como Motivos de son, Sóngoro cosonmgo, El son entero, La paloma de vuelo popular, Tengo, El gran zoo y El diario que a diario, junto a Prosa de prisa –que en cuatro tomos antologan su periodismo–, integran su bibliografía.
Fundador y presiente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, Nicolás Guillén defendió, desde su más temprana juventud, los ideales de justicia, dignidad, libertad y soberanía de la patria amada.
Buenos días Fidel, esta selección de textos, es no solo un homenaje al legendario comandante. Es, también, una enriquecedora mirada, a través del verso y la prosa de Nicolás Guillén, a la propia historia de la Revolución Cubana.