Los trabajadores azucareros del municipio de Ciro Redondo, en Ciego de Ávila, recordarán el próximo domingo en labores productivas el aniversario 61 del primer trabajo voluntario convocado por el Comandante Ernesto Guevara de la Serna que tuvo por escenario la ciudad escolar Camilo Cienfuegos, de la oriental provincia de Granma, el 22 de noviembre de 1959.
El domingo próximo, el homenaje con motivo de la efemérides, será en las labores de limpieza y otras acciones de apoyo en la recta final de las reparaciones del central azucarero Ciro Redondo que se alista para la arrancada de la zafra en diciembre venidero.
Federico Pérez Quiala, secretario general del Sindicato que agrupa a las fuerzas de la industria azucarera, los derivados, la agricultura cañera y las entidades de aseguramiento a este sector en el centro del territorio avileño, informó que en las próximas horas se iniciará un proceso político en cada colectivo para establecer los compromisos que garanticen el cumplimiento del plan de azúcar y las atenciones a los cañaverales, con vistas a asegurar también la materia prima para futuras contiendas.
La conmemoración que tendrá lugar la próxima jornada dominical, será de elevada significación histórica, pues en campos cañeros cercanos al poblado cabecera nombrado Pina, el Che realizó en 1963 la jornada más larga (15 días) de trabajo voluntario en Cuba, al dejar fundada la mecanización del corte y el alza de la caña, y también participó en el extranjero en la adquisición del equipamiento para la fábrica de levadura torula Alfredo Roberto Pérez González, enclavada en el territorio pinense.
El Ciro Redondo, mayor productor de caña en la central provincia de Ciego de Ávila, ha sido sometido a un proceso inversionista que lo convierte en el más moderno del país, entre las fábricas de su tipo pertenecientes al grupo empresarial AzCuba.
Entre los equipos instalados, como parte de la millonaria inversión, se encuentra una desfibradora para mayor limpieza de la materia prima en el basculador ampliado con el propósito de incrementar la capacidad de recepción de seis mil a ocho mil toneladas de caña en cada jornada, y los reductores planetarios que facilitarán el crecimiento de la norma potencial de molida diaria.