Los cienfuegueros pensaron que ya todo había pasado, que la tormenta tropical Eta era parte de la larga lista de fenómenos meteorológicos que han afectado a Cuba. Toda la tarde de ayer fue de una calma chicha, como dicen los marineros. Pero al comenzar la noche la lluvia dijo “aquí estoy de nuevo” y aunque no se cuenta aún con los registros oficiales, puede asegurarse que han sido intensas y con pocos y cortos intervalos.
El comportamiento de la naturaleza también tiene sus caprichos.
Según el Grupo de Pronósticos del Centro Meteorológico de esa provincia “el día estará parcialmente nublado (…) y las probabilidades de chubascos, lluvias y tormentas eléctricas pueden ocurrir durante el día, principalmente hacia la parte centro sur y la zona montañosa de la provincia”.
Hasta el momento de redactar estas líneas el sol sigue perdido y una nubosidad intensa y grisácea señorea en las alturas.
La situación ha precisado suspender de nuevo las clases en los centros educacionales y adoptar algunas medidas excepcionales, como la evacuación de personas residentes en zonas bajas y de posibles inundaciones.
La corresponsalía de Trabajadores en ese territorio conoció en horas tempranas de la mañana del desbordamiento del río Caunao sobre el puente de la vía principal que une a las localidades de Cruces y Potrerillo, lo que impide el paso de personas y vehículos. En ese asentamiento se ha hecho preciso el traslado de residentes que viven en zonas con peligro, debido al aumento del nivel de las aguas y la fuerza que ha adquirido esa corriente.
Estamos a la búsqueda de más elementos. Informaremos oportunamente.