A las puertas del cierre de una año difícil como pocos, y en medio de tensiones económicas y sanitarias, los afiliados a la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en la suroriental provincia santiaguera respaldan la convocatoria a una respuesta más proactiva y creativa.
En matutinos y vespertinos todos los colectivos laborales de Santiago de Cuba patentizan su apoyo al documento firmado por el Secretariado Nacional de la CTC y publicado este lunes en la edición impresa del periódico Trabajadores.
Así lo hicieron, por ejemplo, los más de 400 trabajadores de la Unidad Económica de Base Combinado Lácteo de la zona de El Caney, perteneciente a la Empresa Provincial de Productos Lácteos, entidad que aporte en tres líneas productivas surtidos de amplia demanda como yogurt, quesos, refresco instantáneo, leche en polvo enriquecida, mezcla para batidos y helados, entre otros.
Con la presencia de Esperanza González, miembro del secretariado provincial de la CTC e Irma Jay, secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la Industria Alimentaria y la Pesca, se dio lectura al llamado de la organización proletaria sustentado en la necesidad de sacar a la luz todas las reservas como manera de hacer frente, desde la producción, a los limitaciones que vive el país como consecuencia del recrudecimiento del bloqueo.
La representación de obreros y técnicos del combinado lácteo de Santiago de Cuba refrendaron a mano alzada la voluntad de seguir buscando alternativas y poniendo en el extra en la labor diaria para garantizar los alimentos que elaboran, lastrados en sus volúmenes físicos por problemas tecnológicos y déficit de materias primas.
Una y otra situación, consecuencia tangible del propio bloqueo, no pone frenos al optimismo y los deseos de avanzar a un colectivo que ha demostrado ser de vanguardia en medio de condiciones difíciles por lo que, una vez más, deciden movilizarse productivamente inspirados en su amor por Cuba.