Dice un viejo proverbio: “el que tiene un amigo tiene un central”. Zeti lo maximiza: es el amigo de los centrales, pues con la capacidad tecnológica y experticia de sus trabajadores brinda los servicios técnicos y fabrica equipos tecnológicos, partes y piezas para los ingenios y para los sectores de la construcción y de la energía.
La Empresa de Servicios Técnicos Industriales (Zeti), del Grupo Azucarero es líder en el mercado cubano y del Caribe en la prestación de servicios de construcción y montaje industrial, automática y robótica de la industria azucarera; producciones metalmecánicas, eléctricas, de materiales de construcción y derivados de la roca caliza, por lo cual genera ventas mensuales de alrededor de 20 millones de pesos.
Con diez años de creado (un 27 de octubre), tiene su génesis en la fusión de los grupos empresariales Geca (más de 35 años de servicios) y Tecma (centenaria de la familia), herencia aprovechada en la diversificación y encadenamientos productivos que la hacen competitiva y presente en cada ingenio erguido sobre los campos de Cuba y en algunos en el extranjero.
Leovis Mesa Ramírez, director de Comercialización y Logística de Zeti exalta los valores de los colectivos de la entidad, y asegura que en ellos se integran los mejores especialistas del país en cada actividad, con figuras emblemáticas que se buscan para destrabar escollos y son maestros de la nueva hornada que le da continuidad.
Entre las joyas que atesora Zeti, menciona la Fábrica de Calderas de Sagua la Grande, única de su tipo en el país, la fundición 9 de Abril, del mismo municipio, y la Manuel Fajardo, de Manzanillo; los talleres de automática y la industria de producciones mecánicas de Santiago de Cuba, que brinda servicios a terceros y donde, por ejemplo, las termoeléctricas encuentran parte de sus componentes.
El directivo reconoció el aporte de las seis plantas productoras de cal (Santiago de Cuba, Holguín, Las Tunas, Camagüey, Ciego de Ávila y Cienfuegos) a las entidades del Grupo Azucarero, de la agricultura y la geominera, y de la unidad empresarial de base de La Habana, la cual fabrica cadenas para los transportadores de los centrales, ejecuta el mantenimiento a los turbogeneradores y enrolla los motores de alta potencia que mueven los molinos. “Todo lo que necesita un central, lo hace Zeti”, afirmó Leovis Mesa.
La premisa de la calidad
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Para los especialistas de Zeti, la calidad es esencial a la hora de brindar un servicio, construir equipamientos o alguno de los derivados, por lo que aplican las políticas más rigurosas, incluidas las reguladas por las Normas Internacionales ISO, que se validan con regularidad, explicó Mesa Ramírez.
Igualmente, la entidad enfoca sus prácticas hacia la transformación de una industria que sea amigable con el medio ambiente ya sea con el uso y generación de energías limpias, que se obtienen comúnmente de la combustión del bagazo, un residuo de la industria, y se proyecta al logro de industrias eficientes que trabajen en armonía con las comunidades.
El directivo comentó que en ese empeño Azcuba tiene un paradigma con el establecimiento de plantas bioeléctricas, al poner en funcionamiento la primera de ellas, como resultado de la colaboración con países amigos, y se acopla al central Ciro Redondo, de Ciego de Ávila, la cual empleará bagazo en época de zafra y residuos forestales una vez agotada la materia prima que genera el proceso industrial. Esta es la obra cumbre del año en Zeti.
Después del diagnóstico que se realiza a cada central al concluir su período de molienda, comienza una etapa de mucha acción para los trabajadores de Zeti, quienes se ocupan de las reparaciones y alistamiento de las fábricas con tiempo suficiente para que ejecuten las pruebas y arranquen cumpliendo el cronograma establecido en el país.
Ello demanda un esfuerzo en las seis fábricas que para esta zafra fabrican mazas, coupling, raspadoras, bombas, muchas entregadas ya, así como cadenas cañeras y bagaceras nuevas y reparadas con sus componentes. Trabajan además en la construcción y montaje de los nuevos laboratorios del Instituto de Investigaciones de los Derivados de la Caña de Azúcar (Icidca). Y ya concluyeron una planta de biofertilizantes en Palma Soriano, en el oriente de la isla.
Con igual compromiso que asumen con la zafra azucarera, los más de 5 mil trabajadores de Zeti se involucran en la producción de alimentos para abastecimiento y el de las comunidades, además de la construcción y el montaje de plantas para alimento animal.
