Cuentan sus colegas de trabajo que Yonaikis Rábago Iglesias (más conocida por Yuyú), jefa técnica del laboratorio de microbiología del Hospital Universitario Clínico Quirúrgico Comandante Manuel Fajardo, es de las personas que más muestras ha tomado en la capital para luego realizar el PCR y detectar la presencia del virus SARS-CoV-2.
A su experticia como microbióloga se ha sumado la disposición y profesionalidad en una misión de la cual depende preservar la salud de los seres humanos. Así en esta tarea permanece prácticamente desde que en el país se detectaron los primeros casos y ella, junto a una especialista del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología (CPHEM), recorrió varios centros de aislamiento y otros lugares donde, con igual propósito, permanecía el personal de la salud.
Sin embargo, desde el pasado 15 de agosto —aun cuando todas las condiciones estaban creadas desde el día 13, aniversario 94 del natalicio del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz— Yonaikis integra el equipo de 20 jóvenes que laboran día y noche (24 por 72 horas) en el laboratorio de biología molecular reabierto allí para analizar muestras “a raíz de la situación epidemiológica que afronta la capital”, según explicó el director de la institución, el doctor Manuel Blanco Pego, especialista en Medicina Familiar.
Ante la necesidad de pesquisar a un mayor número de personas el Ministerio de Salud Pública (Minsap) decidió incrementar el número de unidades para realizar más PCR, aprovechando aquellos servicios que tuvieran la estructura y las condiciones mínimas para hacerlo.
De esta forma, una parte del laboratorio de microbiología —señaló el doctor Manuel— quedó aislado, climatizado, y se recibió también del Instituto de Nefrología el equipo específico de PCR que permite detectar el nuevo coronavirus que causa la COVID-19.
“En menos de una semana los especialistas del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí y del CPHEM comenzaron a capacitar a quienes aquí procesarían las muestras de PCR a través de una técnica manual, ya no digital como existen en otras instituciones”.
Por su parte, la doctora Thais Lok Ramos, designada para asegurar la tarea desde el punto de vista administrativo, manifestó que siempre contaron con el apoyo del Minsap y de la Dirección Provincial de Salud. “La puesta en marcha ha sido un camino difícil pues las muchachas no dominaban la técnica, pero han enfrentado la actividad como las Marianas de estos tiempos”.
El equipo que labora en el reabierto laboratorio de biología molecular lo integran 20 personas, dos de ellos son hombres que asumen como secretarios y se encargan de las estadísticas y de enviar los partes al CPHEM.
Agregó que las demás son mujeres, “algunas recién graduadas de la especialidad de Microbiología, otras provienen del laboratorio del Instituto de Nefrología, a quienes se han sumado nuestras licenciadas y técnicas, como es el caso de Yuyú, con una labor destacada, entregada totalmente a la actividad”.
Como todas las pruebas —precisó la doctora Thais— siempre existe la posibilidad de tener un margen de error. Un 10 % de las muestras negativas se envían al Hospital Hermanos Ameijeiras o al CPHEM (cuentan con una tecnología más moderna) para confirmar el correcto funcionamiento del proceso. Es una especie de control de calidad. Asimismo, al total de las positivas se les realiza un rechequeo.
Tanto ella como el doctor Manuel confían en que cada vez más este quehacer se realice con mayor calidad, pues se trata de una carrera por la vida. La meta es 200 PCR diarios, al margen de otros análisis clínicos que deberán continuar haciéndose en el laboratorio de Microbiología, el cual garantiza la vitalidad de los servicios del hospital.
“Siento orgullo de que me hayan dado una tarea de esta envergadura, a la que le he puesto todo mi empeño, como todo lo que hago. Confío en hacerlo bien, para así no defraudar la confianza del profe Manuel”, enfatizó la doctora Thais mientras aseguraba el trabajo del día.