Este 20 de agosto la Empresa Pecuaria Genética de Matanzas (EPGM) celebra medio siglo de existencia enteramente orgullosa de ser fruto de la contribución de Fidel Castro Ruz, inspirador de un proyecto del cual estuvo al tanto desde los preparativos iniciales, hasta su fundación en 1970, así como también durante el ulterior desarrollo de esta entidad, donde surgiera la raza Mambí de Cuba.
La idea del Líder Histórico de la Revolución dio paso a un plan inversionista que favoreció un cambio en la vida social de cientos de campesinos y sus familias, los cuales se vieron beneficiados con la construcción de las comunidades Triunvirato y Manolito, rodeadas por una cantidad superior a las 100 vaquerías.
A tan significativa fecha llega hoy esta empresa con el desafío de cumplir un plan de recuperación a mediano y largo plazos, que tiene como propósito ponerla en condiciones de satisfacer las entregas de leche a la industria, ritmo productivo que ha perdido de manera considerable en los últimos tiempos, valoró Osmar Ramírez Ramírez, secretario general del Comité Provincial de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) en Matanzas.
Ramírez Ramírez dijo a Trabajadores que los festejos por los 50 años de la EPGM deben significar un momento de profunda reflexión en torno a la necesidad de implementar la diversificación, el incremento de las siembras para garantizar alimento animal, emplear más la inseminación artificial, disminuir la mortalidad, combatir el delito y buscar mayor eficiencia .
En el año 1987, la EPGM registró la cifra histórica de 58 millones de litros. Sin embargo, según una publicación del periódico Granma (30 de julio de 2019), la inestabilidad en la base alimentaria y el escaso suministro de agua, motivado por el deterioro del sistema de bombeo y abasto, con más de 40 años de explotación, había creado en aquel momento altibajos en la producción.
Tres años de incumplimiento del plan de entrega de leche, que llegó incluso a ser de tan solo 12 000 litros diarios, apenas un tercio de sus potencialidades, era una de las cifras más elocuentes de la necesidad del cambio en una institución donde morían más de 400 animales por mes.
Con un panorama así ha tenido que lidiar esta empresa, “comprometida hoy más que nunca con honrar el legado de Fidel Castro, y en ese camino andan. Desde el movimiento sindical hacemos lo que nos toca para devolver a los años de esplendor a una empresa que tiene potencialidades para convertirse en la mejor del país”, estimó el secretario general de la CTC en Matanzas.
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