“Una tarea de primer orden en los tiempos actuales será elevar la exigencia por la disciplina y la calidad en todo lo que nos proponemos y hacemos”, aseveró el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en una importante reunión, mediante videoconferencia, con las máximas autoridades de las provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, que dedicó su agenda al chequeo de la operación contra coleros, revendedores y acaparadores; a la situación energética del país; al contexto epidemiológico; y a la producción de alimentos.
Esta amplia sesión de trabajo — que tuvo por sede el Palacio de la Revolución — contó con la participación del segundo secretario del Comité Central del Partido Comunista, José Ramón Machado Ventura; el Vicepresidente de la República, Salvador Valdés Mesa; y el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, quien condujo la reunión.
No nos podemos cansar
Desde inicios del mes de agosto, en todo el país se desplegó un plan de enfrentamiento contra coleros, revendedores, acaparadores y el tráfico ilegal de divisas, que ha generado un mejor ambiente y organización en los entornos de las tiendas y centros comerciales, además de la posibilidad de que un mayor número de personas pueda acceder a los productos que en ellos se expenden.
Según datos aportados por el Ministerio del Interior en este encuentro de trabajo, desde el comienzo de la operación han sido procesadas más de 7 mil personas vinculadas a esas conductas, principalmente en La Habana, Granma, Holguín, Ciego de Ávila, Artemisa y Mayabeque.
Al intercambiar con las autoridades de los territorios sobre este enfrentamiento — en el que se han involucrado más de 23 mil compañeros del Ministerio del Interior, las Fuerzas Armadas Revolucionarias, las organizaciones de masas, los organismos e instituciones de la nación — Diaz-Canel señaló que “va dando resultados y ha demostrado lo necesario que era este proceso; no podíamos seguir con las manos cruzadas y esto había que enfrentarlo.
Nos ha indicado lo nocivo de acumular los problemas, porque lo que estamos haciendo en medio de la epidemia de la COVID-19 existía desde antes”.
Aquí lo más importante, apuntó el Jefe de Estado, es la acción cotidiana y esa tiene que partir de la gestión de cada uno en el lugar que le corresponde, sin esperar indicaciones nacionales, para enfrentar cuestiones que son ilegales, con los mecanismos que tenemos y la experiencia acumulada en tantos años de Revolución.
El mandatario manifestó que los pasos dados en el enfrentamiento han demostrado los niveles de compromiso entre diferentes figuras y actores, tanto del sector estatal, como no estatal.
Destacó la confianza de la población, “que nos exigió, que nos estaba pidiendo accionar sobre esto”. El pueblo ha apoyado y también ha participado, enfatizó, mientras el enemigo sigue tratando de desacreditarnos y de demostrar que se ha actuado con odio.
Ahora tenemos que centrarnos, indicó el Presidente, en lograr mayor eficiencia de los grupos de trabajo, en mejorar su tarea y no permitir el oportunismo que, en casos muy mínimos, se ha dado. Asimismo, debemos observar, dijo, cómo cambian los modos de actuación, sobre todo de los revendedores que se anuncian en sitios de internet.
El mandatario llamó la atención sobre cuidar el destino de los productos que se decomisan como parte del enfrentamiento al delito, para que se utilicen en beneficio directo de la población.
Este enfrentamiento, aseveró Díaz-Canel, lo haremos en diferentes modalidades, pero llegó para quedarse. Lo adaptaremos al momento que estemos viviendo, “pero la vida nos ha enseñado que esto no lo podemos dejar acumular nunca más, por lo tanto hay que hacerlo efectivo, eficiente y tenemos que sistematizarlo”.
No nos podemos cansar, afirmó, muchas de estas personas se han replegado en espera de que nos cansemos, pero “esta es una lucha sin cuartel”, recalcó el Presidente de la República.
Prioridades para no afectar a la población
Ante un incremento en el mes de agosto del consumo de energía eléctrica en varias provincias y organismos de la Administración Central del Estado, que no logran aún enmarcarse en los planes aprobados, se realizó un análisis de las medidas de control que desde finales del año pasado se implementaron en todo el país y se han ido resquebrajando.
En medio de la escalada de agresiones del gobierno de los Estados Unidos, el impacto de la pandemia de la COVID-19 y el incremento del precio de casi todos los recursos en el mercado internacional, aseguró el ministro de Energía y Minas, Liván Arronte Cruz, que “el país ha hecho un enorme esfuerzo por garantizar la sostenibilidad del sistema eléctrico y no se han producido apagones por déficit de generación”.
Para mantener el principio de no afectar a la población, se hace necesario intensificar las medidas relacionadas con la autolectura diaria en todos los centros estatales; el desplazamiento de los consumos de energía fuera de los horarios pico diurno y nocturno; el funcionamiento diario de los Consejos Energéticos Provinciales y Municipales; así como el ahorro en los hogares, sector que demanda más electricidad.
Luego de intercambiar de esos temas con las autoridades de las provincias más consumidoras — La Habana, Mayabeque, Villa Clara, Cienfuegos y Ciego de Ávila — el Presidente Díaz-Canel señaló que hay que establecer prioridades y buscar todas las fuentes de ahorro, que siempre las hay, porque todavía se despilfarra mucha energía eléctrica.
Tenemos que ser más eficientes, salir del horario pico con los grandes consumidores, proteger a la población y también las producciones esenciales como la de alimentos. “Lo importante es pensar y gestionar, para mantener las prioridades, en medio de las limitaciones”, precisó.