De manera cotidiana el Líder histórico de la Revolución Cubana recibe el homenaje junto al sitio donde reposan sus cenizas pero este 13 de agosto, en el día del aniversario 94 de su natalicio se multiplica la presencia de los que agradecen su existencia y siguen su ejemplo.
El cementerio patrimonial de Santa Ifigenia, en la suroriental provincia de Santiago de Cuba, volvió a colmarse un pueblo que no precisa de convocatorias para llegar hasta el monolito que atesora los restos mortales de Fidel Castro Ruz,
Es la respuesta espontánea a lo que dicta el corazón, a lo que inspira la conciencia, el deseo de dar gracias al hombre grande que hizo tangible la libertad de una nación.
Desde horas bien tempranas de este jueves pasan frente al monolito dirigentes gubernamentales y partidistas de la provincia, campesinos, obreros, amas de casa, jubilados, estudiantes, jóvenes, niños y con una flor, un gesto, una sonrisa, tal vez una lágrima, patentizan el cariño infinito por el hombre, el padre, el estadista, el amigo, el entrañable Fidel.
Más allá del camposanto de la ciudad heroica, que se honra con custodiar las cenizas del Comandante en Jefe, se dan también otras expresiones de tributo, de homenaje y recordación para quien es paradigma de todo un pueblo.
En centros laborales, comunidades, plazas públicas, siempre con apego a las normas sanitarias que se concretan en la fase 3 de recuperación pos-COVID-19, se realizan actividades culturales, galas artísticas y otras acciones que avivan la memoria todo cuanto hizo Fidel por Cuba y por la humanidad.
Con la alegría de honrar su legado el pueblo de Santiago de Cuba evoca este cumpleaños 94 y honra al invicto Comandante con la mejor de las maneras: cumplir cada uno con su deber, inspirados en su ejemplo.
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