Teresa Mesa Calzada, mujer que a ojos vistas sobrepasa los 60 años de vida, está inmersa en labores domésticas y feliz de hacerlo, lo que significa que tiene agua en casa. No disimula su alegría, pues por cuatro meses obtener el preciado líquido fue un verdadero dolor de cabeza compartido con sus vecinos del reparto Ceferino Fernández, en la ciudad Pinar del Río, en el occidente cubano.
“Ponían el agua y no llegaba a mi zona; por la madrugada entraba un poquito, teníamos que turnarnos los vecinos para conectar las bombas y llenar los tanques. Todo eso en medio de esta situación de la Covid-19, que no es fácil; pero con las pipas que traía el delegado íbamos resolviendo”.
Asegura Daniel Cruz Montesinos, otro septuagenario del barrio: “Ahora el agua sube hasta la segunda planta y con tremenda presión”. Ellos dos y Rafael Calderín Maqueira, se deshacen en elogios para “los muchachos del acueducto que trabajaron aquí, son buenísimos”.
Muchos más
Forman parte de los miles de pinareños que se han beneficiado con las inversiones y mantenimiento que se realizan en el territorio trabajadores de la Delegación Provincial de Recursos Hidráulicos.
Las obras de mayor envergadura se ejecutan en los municipios de Viñales, La Palma y Pinar del Río, aunque en mayor o menor medida todos se benefician; un ejemplo de ello lo constituyen las conexiones a las viviendas que se concluyen como parte del plan estatal de construcción de las mismas. Este año, además de a casas aisladas, prestarán el servicio de instalación hidráulica a ocho asentamientos poblacionales.
Miguel Antonio Cabrera Gílimas, director de inversiones en la Delegación, comenta que por la compleja situación que atraviesa el país en el enfrentamiento a la Covid-19, no logran al cierre de julio el cumplimiento de todas las acciones previstas.
No obstante, considera como un resultado positivo que acumulen el 96 por ciento de ejecución de las inversiones y el 88 de los mantenimientos. Para inversiones cuentan con un presupuesto de 5 millones 581 mil pesos.
Sobre el tema, Ismael Valdés Chirino, delegado provincial de Recurso Hidráulicos en Pinar del Río, explica que la carencia de un tanque central para la distribución por gravedad atenta contra la estabilidad y calidad del abasto de agua. Además, las pérdidas en conducción y salideros de las redes, tanto centrales como dentro de los domicilios o entidades estatales, traen consigo una reducción del 40 por ciento en la entrega del líquido con respecto al bombeo.
El déficit de maquinaria pesada, como retroexcavadoras, es la mayor dificultad que enfrentan para el cumplimiento del programa de mantenimiento, al cual no renuncian y esperan cumplir al finalizar el año.
Buenos augurios
Valdés Chirino señala que de los 26 embalses que posee el territorio, ocho se encuentran al ciento por ciento de llenado y de manera conjunta al 71, lo que les permite dar respuesta a la demanda realizada por la agricultura y al fomento que experimenta la acuicultura.
Asegura asimismo la recuperación que ha tenido las 21 fuentes sobre las que más se hizo sentir el impacto de la sequía, y el buen estado de la infraestructura de almacenamiento en la provincia.
El delegado provincial de Recursos Hidráulicos dijo que todas las instalaciones que realizan van acompañada de la colocación de metro contadores, lo que permitirá un mayor control sobre el consumo del agua, pues hoy persisten personas con prácticas indolentes que no suprimen salideros dentro de las viviendas o entidades a su cargo.
El Día del Trabajador Hidráulico
La celebración por el Día del Trabajador Hidráulico no escapa al contexto impuesto por la pandemia y por tanto este lunes no hubo actos multitudinarios, sino matutinos especiales, en los cuales se entregaron reconocimientos y distinciones a colectivos y obreros destacados en su desempeño.
Concedieron el sello Faustino Pérez a cuatro hombres y siete mujeres con más de 50 y 35 años de labor ininterrumpida en el sector, respectivamente; también la distinción Armando Mestre a otros seis con más de dos décadas de permanencia.
Así lo confirmó Lifer Félix Vázquez Ceja, secretario general del buró provincial del Sindicato de los Trabajadores de la Construcción al cual están afiliados más de 1700 laborantes en el territorio.
Sin motivos para la complacencia, porque aún hay deficiencias por resolver, pero apegados al espíritu de laboriosidad que los identifica, celebran su día renovando votos en la búsqueda de la excelencia en su desempeño y garantizar un servicio de mayor calidad y sostenibilidad. Así no solo Teresa, sino muchos más los que mostrarán su agradecimiento.
