Comete un gran error quien imagine que el tabaco, uno de los elementos integradores de la identidad de la nación cubana, ya ha sido, a lo largo del tiempo, lo suficientemente estudiado como para no ser motivo de nuevas investigaciones.
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La publicación reciente de dos libros relacionados con el tabaco, ambos con la firma de Raúl Martell Álvarez, evidencia que el tema, por su alcance y trascendencia, aún puede develar nuevas e interesantes reflexiones.
Se trata de dos obras que, sustentadas en una documentada y minuciosa investigación, se acercan a la industria tabacalera en la Mayor de las Antillas, un tema, por cierto, no ampliamente reflejado en el catálogo editorial de nuestro archipiélago.
Upmann: un habano de + de siglo y medio (Editorial José Martí, La Habana, 2018, 208 pp.), el primero de esos libros, propone un acercamiento a una de las marcas de habanos de mayor prestigio en el mundo.
A través de una fluida narración, el autor presenta en estas páginas la génesis y desarrollo en el tiempo de la marca de tabacos H. Upmann, fundada, en 1844, por el alemán Hermann Dietrich Upmann.
No solo le interesa a Martell Álvarez contar la historia de este alemán y de su empresa, a partir de su creación en el siglo XIX, sino también insertar esa historia en el panorama político, económico y social de Cuba.
La lectura de este libro –como escribe Juan José López Freire, en el prólogo al volumen— es amena y evidencia una exhaustiva labor investigativa, apoyada en testimonios documentales y fotográficos.
En 1898: El arribo de los monopolios estadounidenses a la industria tabacalera cubana (Ediciones Cubanas Artex, Colección Especiales, La Habana, 2019, 136 pp.), Martell Álvarez se propone una mirada a un tema de indiscutible trascendencia.
Como resulta fácil imaginar por el título del volumen, en 13 capítulos y varios anexos se analizan la llegada de los monopolios de Estados Unidos a la industria tabacalera de la isla y sus consecuencias para el desarrollo de la nación.
En el texto que, a manera de prólogo, presenta esta investigación, Roberto Delgado Pérez afirma:
Vuelve Raúl Martell Álvarez a regalarnos un trozo de la historia del tabaco cubano (…).
(…)
(Esta obra) por su título ya posee un atractivo especial; primero, por el histórico diferendo entre Cuba (la fruta apetecida) y los Estados Unidos (el pretendiente de la fruta); segundo, por ser este último el mayor consumidor de tabaco del mundo. Solo en este país se fuma más tabaco que la suma de todos los demás países del orbe y Cuba produce el mejor tabaco del mundo. Ambas categorías no admiten ninguna discusión.
Economista de profesión, Raúl Martell Álvarez (La Habana, 1940) se ha dedicado, por años, al estudio e investigación de la industria tabacalera en Cuba y es autor de varias obras relacionadas con tan sugerente tema.
Entre sus libros publicados se encuentran, entre otros títulos, Los alemanes y el tabaco cubano (2013); H. Upmann. 170 años (2014); Gustav Bock y los trusts tabacaleros en Cuba (2015); y Fumando en La Habana. Los Upmann. Una familia alemano-cubana (2016).
Bibliografía a la que ahora Raúl Martell Álvarez suma estas dos nuevas propuestas: H. Upmann: un habano de + de siglo y medio y 1898: El arribo de los monopolios estadounidenses a la industria tabacalera cubana.
Dos obras, como no es difícil de advertir, que no solo contribuyen a enriquecer los estudios relacionados con el tabaco en la Mayor de las Antillas, sino también la propia identidad de nuestra nación.
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