“No tengo la solución ni una varita mágica, pero sí la edad y los recuerdos de una Centro Habana muy digna”, nos escribe Miguel Jesús Ojeda Vila, vecino de Estrella no. 358, entre Lealtad y Escobar.
“Tumultos, pegadera entre personas, nasobucos quitados, ventas de mercancías a sobreprecio, colas desde la madrugada.
“¿Alguien trabaja? ¿Ya los jóvenes ni estudian ni trabajan? La imagen de nuestro municipio tiene que estar por encima de la que genera una situación de desorden.
“Hay periodistas que han tratado el tema y esta es mi manera de apoyarlos”.