Las galerías y los museos integran la avanzada de la cultura en el proceso de recuperación tras el mayor impacto de la pandemia de la Covid-19.
La mayoría de las instituciones en el país, en todos los territorios donde se aplica la primera fase, ya abrieron sus puertas al público. Eso sí, siguiendo todas las medidas de las autoridades sanitarias.
«En esta primera fase mantendremos el plan aprobado por el país y por los consejos de defensa de cada provincia —dijo Norma Rodríguez Derivet, presidenta del Consejo Nacional de Artes Plásticas—; a las galerías no debe entrar nadie con síntomas respiratorios o fiebre, se debe usar el nasobuco, habrá a disposición de los visitantes y del personal que labora en cada lugar medios para la higiene. Son, en definitiva, todas las medidas sanitarias previstas».
En los museos también se toman esas medidas.
«Hemos tenido en cuenta protocolos trazados por el Consejo Internacional de Museos, y otros protocolos creados en México, Argentina, Colombia y España, para articular nuestro propio protocolo de acción en esta etapa de recuperación», precisó José Antonio Rodríguez González, director de Museología del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural.
«Diferenciamos tres aspectos esenciales: medidas de higienización, medidas relacionadas con la bioseguridad, y medidas que tienen que ver con la animación cultural en los museos», agregó.
En todas las instituciones se desinfectará habitualmente objetos y elementos del mobiliario y la arquitectura que puedan ser tocados por el público. Y se tomará en cuenta la cantidad de personas que pueden estar al mismo tiempo en las salas de exhibición.
«Se tendrá en cuenta el tamaño de los espacios. Creemos que en las galerías más grandes no deben permanecer más de quince personas en una sala. Y en las más pequeñas no más de diez. La propia lógica del acceso a las galerías, que no registran casi nunca aglomeraciones, facilita la aplicación de las medidas», explica Rodríguez Derivet.
Otra cosa sucede los días de inauguración de muestras. Buena parte de las galerías están exhibiendo las muestras que se inauguraron en marzo y que el público no tuvo tiempo de disfrutar. Habrá pocas aperturas de nuevas propuestas, y se realizarán por invitación, garantizando las disposiciones de capacidad.
En los museos, según Rodríguez González, se recomienda marcar en los pisos distancias de 1,5 metros, para que los visitantes no se aglomeren.
«Hemos tratado de que las visitas sean en su mayoría guiadas, o con previa reservación. En los museos municipales, que reciben normalmente menos visitantes, quizás no haga falta, pero en otros museos de gran convocatoria priorizaremos esta opción», añadió el directivo.
Esta decisión busca evitar que los visitantes transiten por las salas sin orden, situación que pudiera propiciar la interacción de varios flujos de personas.
El directivo insistió en la necesidad de cumplir el protocolo y confió en el compromiso y la disposición de los trabajadores para asumir esta nueva etapa.
