Son tiempos de solidaridad y de entender la salud como un derecho, principio que alienta la colaboración de nuestro país ante la emergencia, afirmó hoy Bruno Rodríguez Parrilla, ministro de Relaciones Exteriores Cuba, al intervenir en la XXV Reunión Ordinaria del Consejo de Ministros de la Asociación de Estados del Caribe (AEC).
Aseguró que la pandemia del coronavirus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19, cuyo epicentro se ha desplazado a Estados Unidos y sus efectos amenazan gravemente a América Latina y el Caribe, ha generado una crisis sanitaria de enorme magnitud, una amenaza a la vida de todos.
La pandemia confirma la necesidad de la cooperación y la solidaridad para enfrentar la pandemia y los crecientes desafíos derivados de ella, sentenció.
Cuba ha respondido solicitudes de varios países mediante el envío de profesionales y técnicos de la salud para desarrollar labores asistenciales y de asesoría en 16 estados miembros de la AEC, dijo, que unidos a las Brigadas Médicas que permanecían desde antes, elevó a 20 el número de los Estados de la Asociación con los cuales hoy desarrollamos cooperación médica.
Comentó que al reto de preservar la vida humana en condiciones de pandemia se añade la necesidad de reactivar las economías de las naciones, tras la abrupta disminución de la actividad productiva, económica y comercial.
Economías duramente golpeadas por la crisis económica internacional, los efectos del cambio climático, los desastres naturales y la agobiante e insostenible carga de la deuda externa y del injusto sistema financiero internacional, agregó.
Aun en este escenario se continúan aplicando medidas coercitivas unilaterales, contra países como Venezuela y Nicaragua que provocan daños humanitarios e imposibilitan que los gobiernos adquieran equipos médicos y fármacos para tratar a los enfermos, alertó el ministro.
Rodríguez Parrilla subrayó que en el caso de Cuba, se ha recrudecido el bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos y se acentúa una campaña políticamente motivada contra la cooperación médica cubana, dirigida a privar de estos servicios a cientos de miles de personas.
Asimismo, agradeció a la AEC y a todos sus Estados miembros por su oposición a la irracional, ilegal y cruel política de bloqueo contra el pueblo cubano.
Reiteró el rechazo de su país a las listas y certificaciones unilaterales que afectan a países de la Asociación, igual que repudia la inclusión de Estados miembros en las listas de naciones no cooperativas y hace un llamado a un diálogo constructivo al respecto.
El canciller cubano saludó la elección de República Dominicana como Presidente de la Mesa Directiva del Consejo de Ministros de la AEC y calificó de excelente la conducción de la primera ministra de Barbados, Mia Motley, y del canciller Jerome Walcott.
Encomió también la eficaz ejecutoria de June Soomer y ofreció una cálida bienvenida a Rodolfo Sabonge como nuevo secretario general, «con la certeza de que pondrá su amplia experiencia y capacidad en función del cumplimiento exitoso de los mandatos emanados de nuestros jefes de Estado y Gobierno».
A quienes inician su periodo en tan importantes responsabilidades les expresamos nuestra disposición a continuar contribuyendo con la Asociación. A los que concluyen, les reiteramos nuestra gratitud, expresó el ministro cubano.
Manifestó la seguridad en que esta importante reunión de la AEC contribuirá decididamente a hacer avanzar la Asociación, y sostuvo que Cuba proseguirá trabajando en favor de la unidad, la concertación y la consolidación de la misma.
(Tomado de ACN)
