En momentos en que la situación económica del país se tensa, limitada por las medidas para prevenir la COVID-19 y por los efectos del bloqueo, los agropecuarios, forestales y tabacaleros cubanos recurren a la eficiencia, al ahorro de recursos y al aumento de las exportaciones.
Néstor Bárbaro Hernández, diputado al Parlamento y secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores Agropecuarios, Forestales y Tabacaleros (SNTAFT), lo informó a Trabajadores, y precisó que en estas etapas la emulación juega su papel de motor impulsor de la productividad y la eficiencia.
Esta es la razón por la que el sindicato, junto al Ministerio de la Agricultura y los órganos de dirección de cada rama, potencia las microemulaciones registradas en los movimientos productivos que empujan la preparación de tierras, las siembras, los cultivos, las cosechas y las exportaciones, definió Néstor.
La base de esta emulación, comentó el dirigente sindical, está en la producción tabacalera. De sus resultados emulativos se tomaron experiencias para diseñar e implementar las demás. Multiplicadas en tres fases —tabaco agrícola, preindustria e industria—, tienen el propósito de aumentar el rendimiento, mantener la auténtica calidad de las hojas y exportar.
Aparejada con este y con los demás movimientos, anda la ciencia y la técnica, soporte de la producción; la sabiduría de expertos agricultores, y la capacitación de los nuevos que brota como la hierba después de la lluvia.
Néstor Hernández también comentó la trascendencia del movimiento productivo Mi grano cuenta, clave en el ascenso de los rendimientos del arroz, tan comprometido en la sustitución de importaciones y que define a las principales arroceras como protagonistas de la entrega al encargo estatal.
Papelitos hablan
Tal como dice un colega de Juventud Rebelde que papelitos hablan, el sindicato y las estructuras administrativas diseñaron el reglamento de la emulación socialista, que se aplica y generaliza en todas las provincias, con resultados en la implementación de los Movimientos Productivos de Avanzada.
Explicó Néstor que con esa acción responden a la convocatoria de la máxima dirección del país de crecer con nuestros propios esfuerzos, al sembrar, acopiar, producir, vender, exportar más y poner al alcance del pueblo los alimentos frescos e industrializados, y así contribuir a la consolidación y desarrollo de la economía.
La emulación se concierta de manera individual y colectiva, partiendo de las posibilidades de cada productor o estructura de base, con todo rigor se chequearán los resultados, y se estimulará a los más destacados, indicó Néstor. Será un de aporte decisivo ante el impacto de la pandemia.
A pesar de las acciones del bloqueo cada vez más crueles que el Gobierno de Estados Unidos aplica a Cuba, el dirigente sindical tiene certeza del éxito de cada movimiento productivo: cumplir los compromisos.
Etapa de la COVID-19
Además de las microemulaciones mencionadas para la etapa en que Cuba lucha por el control de la COVID-19, se ha pactado en la rama agrícola la denominada Del centro a la mesa, para incrementar las producciones de viandas y hortalizas cumpliendo con la eficiencia económica.
A similar objetivo se apegan las diseñadas para la cosecha de maíz, importante para el consumo fresco y la elaboración de piensos, y la de obtención y acopio de carbón vegetal, rubro que se ha impuesto en el mercado internacional, y que por los beneficios de sus precios merece crecer.
Un movimiento que no es muy joven y siempre es acicate se relaciona con Mi montaña reverdece con las plantaciones de café, pues al decir del Presidente Miguel Díaz-Canel, Cuba deberá producir todo el que consume y exportar.
La Zafra de la leche; Por la ruta del millón, en la producción de huevos; y Produce y aporta, en el porcino, ocupan puestos en estos movimientos, pues son decisivos en la alimentación de los cubanos. No podía faltar esta emulación en la preparación de tierras, actividad afín a todas las de la agricultura.
“Contaremos con el concurso de nuestros trabajadores para desatar las reservas productivas con eficiencia y eficacia, conscientes de que los resultados y experiencias constituirán trabajo permanente en el desarrollo de la producción de alimentos”, concluyó Néstor.
