Carlos Fernández de Cossío, director general para Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, afirmó hoy que el futuro de los nexos de su país con esa nación norteamericana dependerá de lo que le permita la clase política y otros sectores a la Casa Blanca.
El diplomático descalificó la inclusión de la mayor de las Antillas en una lista de naciones que supuestamente no colaboran en la lucha contra el terrorismo, reporta Prensa Latina. «No hay dudas de que ha habido un incremento de la agresividad contra nuestro país, ahora bien, qué se puede esperar del futuro, hasta dónde podría llegar el actual Gobierno estadounidense, eso depende de lo que le permita la clase política de ese país», apuntó.
Fernández de Cossío remarcó que existen amplios sectores de la sociedad estadounidense y muchos políticos, tanto del partido Demócrata como del Republicano, que abrazaron el acercamiento con Cuba entre los años 2015 y 2016 y lo consideraron era un paso positivo para la política exterior norteamericana.
«Este Gobierno y su conducta puede llegar tan lejos como le permitan esos grupos y segmentos dentro de Estados Unidos», acotó.
Sobre el atentado terrorista contra la Embajada de La Habana en Washington el pasado 30 de abril y, paradójicamente, la decisión de la Casa Blanca de colocar a la isla en un cuestionado listado, el diplomático recalcó que se trata de un pretexto endeble y mendaz.
Comentó que existen acuerdos bilaterales firmados en años recientes en virtud de los cuales hay manifestaciones concretas, algunas recientes, de cooperación con el Gobierno de EE.UU. en materia de lucha contra el terrorismo; algunos de los ejemplos muy beneficiosos, especialmente para los Estados Unidos, añadió.
«Lo más importante es que esta es una lista unilateral, una lista del departamento de Estado que no tiene ni respaldo, ni reconocimiento, ni cuenta con el consenso o la aprobación de ningún organismo internacional, destacó Fernández de Cossío».
Precisó que el departamento de Estado elabora listados para desprestigiar, atacar, denigrar o justificar medidas económicas coercitivas contra Estados que defienden su soberanía y no se subordinan al dictado o la voluntad de su Gobierno.
«Washington requiere poner a Cuba en esta lista y en otras, porque no tiene manera de justificar el bloqueo económico, comercial y financiero que es rechazado por la comunidad internacional», afirmó.
Con respecto al silencio del departamento de Estado sobre el ataque por un individuo que descargó 32 cartuchos contra la misión diplomática cubana en Washington con la intención de matar, aseguró que se trata de un silencio cómplice.
«A Estados Unidos le resulta extremadamente difícil hacer un pronunciamiento de este tipo y separarse de la constante instigación a la violencia y de los vínculos con terroristas que viven y han recibido protección y tolerancia dentro de ese país», añadió Fernández de Cossío.
(Con información de PL)