La importancia de desarrollar una política integral para el sector agropecuario que permita alcanzar el verdadero potencial productivo de los campos fue destacada por José Ramón Machado Ventura, Segundo Secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba.
En reuniones de chequeo a los principales programas de esa rama en Artemisa, La Habana, Mayabeque, Matanzas, Cienfuegos, Villa Clara, Sancti Spíritus, Ciego de Ávila y Camagüey, Machado Ventura destacó también la valía de diversificar los surtidos, incrementar los rendimientos y corresponder a las necesidades alimentarias de la nación en el contexto actual, informa el periódico Granma.
En dichos intercambios, continuidad de los encuentros anteriores sostenidos en estos territorios, recordó que la crisis mundial provocada por la pandemia de la Covid-19 también impacta a la economía cubana, sobre la cual el Gobierno de Estados Unidos en los últimos años ha venido recrudeciendo el bloqueo.
Acompañado indistintamente por Salvador Valdés Mesa, vicepresidente de la República; José Ramón Monteagudo Ruiz, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido; Jorge Luis Tapia Fonseca, viceprimer ministro cubano; Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de la Agricultura, y las autoridades territoriales; el Segundo Secretario destacó que algunas medidas llegaron para quedarse.
Enfatizó en que el llamado a producir más, ahorrar, incrementar los rendimientos y la calidad no resulta un capricho de nadie, ni “un problema pasajero por la epidemia”, sino una filosofía de trabajo y una cuestión estratégica para un sector tan importante como la Agricultura.
Si a finales de abril, en composición parecida, Machado Ventura chequeaba, en intercambio con directivos de Artemisa, la estrategia territorial para la campaña de primavera, un mes después constató cada uno de los cultivos comprometidos a sembrar, con sobrecumplimientos en la yuca y el boniato, y aún con reservas en otros como el plátano, el maíz y, sobre todo, la malanga.
Acerca de la leche, con un déficit de 369 mil 500 litros en la provincia, ratificó que no se puede ajustar el plan para acopiar menos, sino encontrar, productor a productor, quiénes no reportan los crecimientos del ganado o desvían la producción.
De ello depende la entrega de este alimento a los niños, mediante la canasta básica normada, señaló. «Los alimentos, incluida la leche en polvo, no solo se encarecerán en el mercado internacional después de esta pandemia, sino que será casi imposible importarlos», explicó, mientras convocaba a potenciar la exportación, otra manera de aportar desde la tierra a la economía del país.
En mayo, Artemisa envió a La Habana más de tres mil toneladas de alimentos, superior a periodos precedentes, y aunque las lluvias de los últimos días solo han permitido las cosechas de plátanos, hortalizas y yuca, el compromiso con la capital sigue en pie, aseguraron directivos locales.
«Contamos con la ventaja de que aún nuestra agricultura no está explotada al máximo; es necesario continuar produciendo para la exportación, pero se hace imprescindible el abastecimiento para el consumo nacional, en estas circunstancias excepcionales, pero también a largo plazo», sostuvo Machado Ventura en la reunión celebrada en La Habana.
Sobre la producción en la provincia, específicamente, explicó que se debe centrar en la obtención de vegetales y hortalizas, puesto que los mercados del territorio están siendo abastecidos en su mayoría, por otros territorios.
En relación con la campaña de primavera, indicó aprovecharla al máximo con énfasis en cultivos de vegetales de temporada como el pepino y la berenjena, entre otros, para lograr un autoabastecimiento que responda a las necesidades de los capitalinos, y de esta forma evitar, incluso, las transportaciones de productos desde largas distancias y otros inconvenientes.
Según Esmeregildo Martínez Báez, delegado de la Agricultura en La Habana, de un plan de siembra de cuatro mil 478 hectáreas hasta la fecha, se sembraron cuatro mil 843,2, lo cual representó un sobrecumplimiento del ocho por ciento.
Entre los asuntos analizados estuvo también la recuperación de los megaorganopónicos, el funcionamiento de más de 88 mil patios de un total de 96 mil existentes en la provincia, además del incumplimiento del plan de leche, del cual solo se ha entregado el 83,96 por ciento.
El alimento animal fue otro de los indicadores debatidos durante la reunión de chequeo en La Habana, respecto al cual Valdés Mesa insistió en la producción, sobre todo, de piensos nacionales, para lo que es una alternativa el aprovechamiento de los residuos industriales, como los lácteos.
En este sentido, el delegado de la Agricultura en la capital afirmó que para la siembra de pastos, forrajes y plantas proteicas se han destinado 826,5 hectáreas, y se cuenta con otras 289 en los bancos de semillas; entre ellas, se ha garantizado la caña, el king grass, así como la guinea y el pasto estrella.
En Mayabeque, Machado Ventura orientó mantener un contacto permanente con los productores agrícolas, conocer sus inquietudes, solucionar problemas que impiden una mayor eficiencia, y evaluar oportunamente cada situación, tras conocer detalles de la marcha del plan de siembra de la campaña de primavera, más favorecido con la llegada de las lluvias al incrementarse las áreas roturadas para cultivos como yuca, plátano, boniato, calabaza, pepino y maíz, entre otros de ciclo corto.
Por su parte, Valdés Mesa, señaló la necesidad de realizar contrataciones con los requerimientos técnicos y legales establecidos para impedir que lo cosechado tome el camino de las ilegalidades. «La provincia tiene que continuar fortaleciendo el papel de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, así como eliminar el número de canteros vacíos que hoy se muestran en varias localidades», precisó.
Carlos Luis Naranjo Suárez, delegado del Ministerio de la Agricultura en Matanzas, explicó, en el intercambio sostenido en este territorio, que, del anterior encuentro a la fecha, los matanceros lograron plantar más de ocho mil 200 hectáreas, volumen por encima de lo planificado, aunque han alistado un poco menos de las tierras previstas.
También, mencionó el acopio de 40 mil cujes de tabaco, los progresos en la llamada recontratación y la entrega de una cifra ligeramente superior a la prevista de viandas, hortalizas, granos y frutas.
Habló, además, de la organización para enfrentar la campaña de arroz, maíz y frijoles, cultivos en el programa alimentario, y admitió que es preciso un esfuerzo mayor en la preparación de los suelos y en la limpia de las áreas ya plantadas.
A juicio de Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de la Agricultura, Matanzas debe estimular al resto de las entidades y productores a sembrar más plátano, yuca, calabaza, malanga y boniato, cultivos de ciclo corto, e incrementar las hortalizas como zanahoria, melón, quimbombó y habichuela.
En el encuentro provincial de Cienfuegos, el Segundo Secretario fue informado del cumplimiento de los acuerdos de la reunión previa del 24 de abril, uno de los cuales, de mucho relieve, consistía en el incremento de la disponibilidad de semilla para dar respuesta a los altos niveles de siembra proyectados.
Félix Duartes Ortega, primer secretario del Partido en ese territorio, subrayó que se le confirió prioridad al completamiento de las fincas de semilla, ya se dispone de las simientes necesarias para los diferentes cultivos y mediante la biofábrica local se introducen variedades de plátano fruta –resistente a la sequía– y malanga.
El delegado del Minag en Cienfuegos, Yoan Sarduy Alonso, expresó que la campaña de siembra de primavera del territorio concibe 33 mil 252 hectáreas. Las condiciones favorables dejadas por las precipitaciones, y la disponibilidad de semillas, posibilitaron un margen de plantaciones que representan el 130 por ciento de lo planificado en mayo y con el concurso de fuerzas de la provincia se han desbrozado hasta la fecha mil 250 hectáreas en los polos productivos de Venero, Horquita, Citrisur y Maleza, más otras 300 en Palmira y Rodas.
Arnaldo Costa Delgado, director de la Empresa Azucarera Cienfuegos, explicó que el territorio aportó tres mil 200 toneladas de azúcar por encima de su plan técnico-económico de la actual zafra, cumplido en sus 117 mil 200 toneladas.
Valdés Mesa recabó emprender un esfuerzo superior en la recuperación cañera, crecer en superficie, en rendimiento, y que todos los centrales cuenten con la caña necesaria para su desempeño; pero, de manera especial, dijo, en el Antonio Sánchez, de Aguada, al cual calificó como modelo en Cuba de la diversificación azucarera, experiencia que va a ser multiplicada en el país.
Sobre el mismo tema, en la reunión de chequeo en Villa Clara pudo conocerse que la provincia incumplió el plan previsto en poco más de 12 mil toneladas, debido a diversas razones de índole objetivo y otras causas que tuvieron que ver con el desempeño de los hombres, lo que motivó una profunda reflexión de Valdés Mesa, quien llamó a realizar un análisis medular que eleve la eficiencia en la próxima contienda.
Al intervenir sobre los resultados de la producción azucarera en Sancti Spíritus, el vicepresidente de la República reconoció la condición de provincia cumplidora y la alta eficiencia industrial que demostraron sus centrales en la reciente cosecha, pero señaló que este territorio está obligado a incrementar la disponibilidad de caña para crecer en las próximas zafras.
Un ejemplo de cuánto las lluvias de los últimos días pueden transfigurar aspiraciones y realidades se constata en la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro, donde la escasez de agua en la presa Zaza había impuesto un raquítico plan de siembra de primavera de 700 hectáreas de arroz, que ahora se ha multiplicado hasta llegar a las seis mil 500.
La siembra de más de cuatro mil 200 hectáreas de cultivos varios, sin que el resultado aún satisfaga la demanda de la población, es la respuesta más contundente de los avileños al reclamo de producir más alimentos.
En este territorio, Valdés Mesa reflexionó que ante la falta de fertilizantes no queda otra alternativa que el aumento de las áreas de siembra, pues, aunque no es la estrategia más adecuada, constituye una de las formas para paliar los bajos rendimientos.
En ese sentido, Orlando Pérez Pedreira, delegado de la Agricultura, detalló que ante el déficit de herbicidas y el incremento del enyerbamiento de los cultivos, la provincia dispone de 50 mil machetes y unas dos mil 400 azadas, empleados en la limpia por los propios obreros vinculados al área y a las movilizaciones populares.
El papel preponderante del municipio como escenario básico en la materialización de las estrategias de desarrollo para garantizar la soberanía alimentaria, fue objeto de análisis en Camagüey por Machado Ventura y Valdés Mesa, en presencia de los presidentes de los 13 consejos de defensa municipales.
Ambos dirigentes razonaron acerca de la necesidad de desplegar en cada demarcación todas las fuerzas productivas, en función de incrementar los aportes locales de viandas, hortalizas, granos, frutas y carne, en medio de una situación compleja para la economía del país.
Durante el encuentro se conoció el propósito de perfeccionar el funcionamiento de los puntos de compra de leche en las unidades agrícolas, a partir de la experiencia de los 177 centros de enfriamiento existentes en la provincia, los cuales, además de preservar la calidad del producto, ofrecen otros servicios a los vaqueros y han permitido hacer más racionales las rutas de acopio.
Tras ponderar la posibilidad de hacer coincidir en un mismo lugar, tanto la venta de las producciones como la oferta de equipos e insumos a los campesinos, Machado Ventura señaló que es una manera de romper y eliminar lo que llamó la cadena del «no», formada por quienes, ante cada tarea, encuentran todo tipo de justificaciones y explicaciones para no hacer nada.
(Tomado de Granma)