Icono del sitio Trabajadores

Exclusivas de béisbol: ¡viva la polémica!

Consciente de que anda encima del polvorín más amado de Cuba, Ernesto Reynoso, director nacional de béisbol, no teme a las balas periodísticas, a la polémica y mucho menos a los cambios. Así ha sucedido desde que asumiera el cargo hace 10 meses. Por eso aceptó una nueva ronda de preguntas tras una entrevista online en la que soltó algunas exclusivas, pero sin lujo de detalles.

La pasada serie nacional dejó un final bien peleado. Foto: José Raúl Rodríguez Robleda

En su oficina del estadio Latinoamericano habla con pasión, pero solicita criterios y sabe escuchar. Explica las variantes que tienen pensadas para la 60 Serie Nacional (SN) y la nueva metodología para elegir al director del equipo Cuba, entre otros temas, aunque puede adivinar que al salir este material no pocas ideas rebotarán a su correo y en las redes sociales, pues las peñas deportivas no discuten hoy en los parques por la COVID-19. “Dispara, pregunta…”

Hace solo unos días habló de cuatro variantes para la 60 SN, en dependencia del tiempo en que pueda iniciarse tras mejorar la situación epidemiológica. ¿Qué más puede adelantar de estas?

El Inder suspendió todas las actividades hasta el 31 de julio. De volver a la normalidad en esa fecha, vendrían luego seis semanas de entrenamiento, por tanto estaríamos pensando en una fecha tentativa hacia el mes de septiembre.

El propósito de cualquier variante siempre será terminar en enero, porque estamos pendientes de la fecha del torneo preolímpico y del Campeonato Mundial Sub-23 (que pudiera también cambiar de fecha para el primer trimestre del 2021) y lo más importante, el próximo año sí queremos aplicar la nueva estructura aprobada. Por tanto, hay que jugar las provinciales en el primer trimestre y arrancar la 61 SN en abril, tal y como lo habíamos concebido.

Ernesto Reynoso, director nacional de béisbol. Foto: Roberto Morejón

Sin crear falsas expectativas hay puntos comunes en las cuatro variantes. Todos los equipos jugarán más de 45 juegos e incluso en la más favorable de las opciones podríamos llegar a 75; no habrá una segunda fase; siempre tendremos play off entre los cuatro primeros y se evalúa escoger refuerzos solo para ese momento.

Además, se jugarán cinco partidos semanales (martes, miércoles, jueves, sábado y domingo) con dos días de traslado; los horarios siempre serán vespertinos y solo se podrá jugar de noche si el territorio tuviera capacidad energética, aunque solo ocho parques tienen condiciones hoy para jugar nocturno.

Hemos establecido 30 parámetros a cumplir por los estadios cabecera y 23 para los terrenos de los municipios que quieran acoger la SN. Los trajes están garantizados y los implementos también (bates, guantes, pelotas, spikes). Jugaremos con la pelota Teammate. Asimismo, todo lo acordado en el curso de preparación de directores para acortar el tiempo de los juegos se aplicará desde el inicio en cualquiera de las variantes.

Mucho revuelo también causó la metodología anunciada para seleccionar al mentor del equipo Cuba. ¿Cómo se llegó a esta decisión?

Debo decir que tuvimos en cuenta fundamentalmente los criterios que salieron en la consulta popular y un análisis histórico de cómo ha sido este proceso. Este punto, la estructura de la Serie Nacional, el sistema competitivo del béisbol en todas sus categorías y la recuperación de la escuela nacional y las academias fueron de los temas que más opiniones generaron en todo el país.

Hubo una etapa en que los directores del equipo Cuba duraban mucho tiempo y casi eran inamovibles. En esa época casi siempre se ganaba a nivel internacional, se jugaba contra peloteros amateurs y esa fórmula daba estabilidad y resultados.

En otro momento se nombraba al mánager por cierto tiempo y luego, por X o Y, lo quitaban sin cumplir el período acordado. Y finalmente se impuso la fórmula del quita y pon todos los años. Es decir, no hay triunfos y te vas, aunque los problemas no sean todos atribuibles a su trabajo. Siempre él los pagaba.

A partir de eso llegamos a la propuesta actual, la cual tiene ya un inconveniente, pues planteamos que transite de Clásico a Clásico, pero ahora todo parece indicar que ese torneo será en el 2023. Nosotros entonces debemos tomar una decisión si lo aplicamos desde el 2021 aunque la evaluación sea de dos años. Tenemos que analizar la cantidad de torneos internacionales que puedan haber y otras variables.

¿Eso quiere decir que todos los directores que estarán en la SN tienen oportunidades de ser el escogido?

Vamos a esperar que se termine la 60 SN para que el último período de evaluación sea esa temporada, porque hemos dicho que el mentor tiene que salir de ese torneo. Es decir, todos son elegibles, pero aclaro que la condición no es ganar la SN, pues haremos una evaluación integral. Pudiera coincidir que sea el manager campeón, pero no es directamente proporcional.

Debo aclarar además que Miguel Borroto sigue siendo hoy el director del equipo Cuba, pues el torneo preolímpico aún no tiene fecha y él estaba al frente del conjunto. No obstante, la decisión final la evaluaremos nuevamente una vez concluida la 60 SN y más próximo al evento en cuestión.

También hay que precisar que solo lo sería del equipo principal. De regresar a las Series del Caribe, el director a ese evento sería el del conjunto campeón.

¿Qué razones hay para que una vez seleccionado deje de participar en la SN?

Primero, quisiera comentarte algo que sucede a menudo en provincias. Hay equipos que son para ganar de inmediato y otros para construir o desarrollar. Si la estrategia de trabajo del director es esa y su gestión está siendo buena, no se debería quitar como sucede muchas veces.

Así lo vamos a establecer a nivel nacional. Una vez en el cargo consideramos que tiene ventajas no seguir dirigiendo en la SN. Digamos, no tendrá el rigor ni el cansancio físico y mental que siempre deja una temporada larga; ocupará más su tiempo en observar a los 16 equipos y a casi 600 jugadores para trazar una estrategia de trabajo junto a la comisión técnica y especialistas como sabermétricos, estadísticos y la tríada médica.

Podrá presenciar juegos en todo el país, hacer evaluaciones y observar el trabajo del colectivo de dirección, sin potenciar jugadores o entrenadores de su provincia de origen, sino a los que mejores condiciones técnicas y físicas tengan.

En cuanto al cuerpo de dirección que lo acompañaría, ¿qué se ha reglamentado para evitar regionalismo o amistad?

Ese cuerpo no lo vamos a hacer permanente como el mentor, sino anual, aunque eso no quita que repitan uno o dos entrenadores y hasta duren el ciclo completo. Ellos sí saldrían siempre de la SN y se les exigirá integralidad, pues no solo es ser buen coach, sino también cumplir con otras misiones que le asignarán en el equipo Cuba. No será posible traer a nadie de afuera, porque ese no ha vivido la campaña ni conoce a los jugadores.

Hay variables para evaluarlos a todos: nivel profesional, experiencia de trabajo en la base, resultados en el tránsito laboral, preparación metodológica, entre otros.

Finalmente, se ha defendido con fuerza la creación del Centro Nacional de Formación y Desarrollo. ¿En qué punto estamos y qué puede decirnos de la lista de talentos para trabajar hasta del 2020 al 2024?

Todavía no podemos hablar de un lugar físico, pero la idea es tener, cuando las condiciones lo permitan, ese Centro Nacional donde podamos concentrar, formar y desarrollar no solo a jóvenes jugadores, sino también a directores, entrenadores y árbitros.

Mientras tanto, ya confeccionamos una lista de más de100 talentos (con un promedio de 20,8 años) y el grupo de 28 especialistas o glorias deportivas que, sin interferir con el trabajo de cada equipo ni en las cargas de entrenamiento en la SN, trabajarán con ellos, por áreas, en el desarrollo del pensamiento táctico, errores técnicos, entre otras correcciones, cada vez que pase uno de esos jóvenes peloteros por sus provincias. Pronto daremos a conocer esa lista.

Ernesto se ha animado a contar los nuevos proyectos. Asegura que el sistema competitivo crecerá y se jugará más pelota en todas las categorías desde la base. Garantiza que Cuba no oficializará los partidos de siete inning, aunque en la SN los partidos doble en una jornada seguirán siendo uno de nueve entradas y otro de siete. “Tenemos que mejorar el espectáculo y hacer más cosas”, se despide. Quedaron temas en el tintero, pero habrá tiempo. Y seguirá el debate.

Compartir...
Salir de la versión móvil