Liván Arronte, ministro de Energía y Minas, destacó hoy la tendencia al decrecimiento del consumo de la energía eléctrica en Cuba, pese al aislamiento social como medida para el control de la propagación de la COVID-19 y la mayor permanencia de las personas en sus casas.
Durante su comparecencia en la Mesa Redonda para informar sobre la producción y el ahorro de electricidad en el país, Arronte explicó que esa disminución sucedió en el periodo del 22 de abril al 12 de mayo, en lo que influyó la respuesta positiva y consciente de la población a la necesidad de ahorrar.
Resaltó como elemento significativo que se dejaron de consumir mil 754 toneladas de combustible diesel, entre una generación del día 22 de abril y la del 12 de mayo.
En otro momento de su intervención, dijo que el Ministerio de Energía y Minas ha estado cumpliendo sus producciones, por ejemplo el níquel al 100.3 por ciento y el petróleo al 102.6 por ciento.
Las producciones geomineras se cumplen igualmente, es decir la sal, el carbonato de calcio, la zeolita, el cinc y el plomo, aseguró.
A su vez, resaltó que en lo referido a la sal no solo se ha garantizado para el consumo humano, sino también la solicitada para la producción de hipoclorito de sodio, ahora tan demandado en las situaciones actuales.
Agregó que la electricidad ha tenido un desempeño estable en lo que va de año, operando con más de 500 megawatts de reserva como promedio diario durante la etapa, aunque han existido algunas interrupciones fundamentalmente en la distribución, precisó.
Hay que decir que el país ha hecho un gran esfuerzo por mantener la generación de electricidad, aún en las difíciles circunstancias que se está desarrollando la economía cubana, muy impactada por el bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de los Estados Unidos, enfatizó el ministro.
Arronte explicó que han ido velando por todo lo que es la eficiencia y el ahorro energético como razón de ser y encargo estatal, por lo que han implementado medidas para controlar el proceso de la energía en la nación.
También expresó que se han mantenido trabajando todas las industrias, en las que garantizan la salud de todos los trabajadores, con medidas higiénicos-sanitarias para prevenir posibles contagios.
En el caso del Despacho Nacional de Carga, que es un centro muy confinado que opera el sistema eléctrico nacional, ahí hemos tomado medidas adicionales de aislamiento del personal para preservar su salud, afirmó.
Añadió que igualmente se siguen ejecutando los mantenimientos y las reparaciones en las industrias para su óptimo funcionamiento; mientras se realizan videoconferencias con el Consejo Energético Nacional para analizar el comportamiento semanal del consumo y evaluar sus resultados, aseguró.
Además, dijo que chequean diariamente el cumplimiento de los planes de consumo por provincias, y en ese aspecto mencionó que respecto a marzo, como promedio, cada vivienda incrementó el consumo un 15 por ciento en el mes de abril, lo que trajo un aumento en los valores de la demanda, sobre todo en el pico del mediodía.
Priorizar el servicio eléctrico y la protección al consumidor ante la COVID-19
Continuar el servicio de electricidad para el sector residencial y el estatal, sin apagones programados ni interrupción por impagos, constituye prioridad para el país en la compleja situación ante la pandemia de la COVID-19, destacó Tatiana Amarán, viceministra de Energía y Minas, en el programa Mesa Redonda.
Como las oficinas comerciales están cerradas al público, se pospuso el cobro del servicio eléctrico, sin corte por impago, desde abril hasta la reapertura de las oficinas. Para evitar acumular facturas, las personas pueden pagar vía electrónica o, desde el martes próximo, a los lectores cobradores, informó Amarán.
Los consejos energéticos a nivel nacional, provincial y municipal analizan de modo permanente el comportamiento de la demanda del sector residencial y de los servicios estatales, entre los cuales el mayor consumidor es el abastecimiento de agua, añadió.
Tomamos decisiones y se efectúan correcciones según corresponda, hace falta más disciplina en el autorreporte de las entidades y se puede desplazar más el riego y los acomodos de carga; hay que producir todos los bienes y servicios sin afectación, enfatizó Amarán.
En las viviendas existe mayor demanda en los horarios picos, especialmente el del mediodía, pero no hay apagones programados, trabajamos por evitarlos y se ha contado con la potencia suficiente para el sistema eléctrico, comentó.
Han ocurrido averías, sobre todo en los circuitos de distribución, por lo que se desenergizan las líneas para reparar, apuntó la viceministra.
El pico de la noche ha bajado en las últimas semanas, esto ha significado un ahorro de recursos en los grupos electrógenos, además, el sistema funciona con más holgura después de la incorporación de la termoeléctrica Antonio Guiteras tras una reparación ligera, señaló.