Amaneció viernes Primero de Mayo, pero el cantautor holguinero Nadiel Mejías no se arregló para desfilar, como lo hizo el año pasado en la marcha proletaria de la capital cubana, cuando su voz entonó, envuelto en melodía, el Concepto de Revolución del Comandante en Jefe.
Sin embargo, aunque no subiría al estrado, como sabe hacerlo, el artista se levantó muy satisfecho consigo mismo. Sobre las cinco de la mañana reaccionó ante la alarma y se dispuso a vestirse, sin olvidar las medidas de protección y el imprescindible nasobuco, consciente de que valía la pena despertar otro día más en la zona roja del Hospital Clínico Quirúrgico Lucía Íñiguez, de su oriental provincia de Holguín.
Sucede que Nadiel prefiere ser útil más allá del arte. No le basta con deleitar a un público que lo ama, que se mueve con su ritmo y disfruta de su talento innato y su empatía. Él quiere, en estos momentos de pandemia, subirse a la tarima de los que se sacrifican y ayudan. Y así lo hizo este Primero de Mayo.
No vaciló cuando a través de una llamada telefónica se le convidó a formar parte del Contingente 59 Aniversario de la Victoria de Playa Girón, organizado por la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) del territorio holguinero para apoyar las labores higiénicas en el Clínico-Quirúrgico, habilitado para tratar pacientes con síntomas respiratorios.
Quien fuera delegado al XXI Congreso de la CTC cuenta que, como siempre, acudió al llamado de la organización proletaria y de los CDR, y hoy funge como coordinador del personal de salud de allí. “Mochila al hombro y con los sueños y anhelos allí dentro, comencé esta batalla. La rutina de trabajo diaria consiste en asegurar la logística de todos estos médicos y enfermeras que están al frente de los posibles pacientes positivos.
“Estoy en zona roja, en contacto con las personas que están tratando con la enfermedad. Cada jornada comienza a las 5 y 30 de la mañana y termina a las ocho o nueve de la noche. El día transcurre con mucho trabajo y mucho control.
“Me siento sumamente feliz al estar vinculado totalmente a la lucha contra la Covid-19, sin temores a contraer la enfermedad porque estamos bien protegidos aquí. Me siento bien por ser útil, porque estoy contribuyendo. Cuando luego se diga que Cuba, nuestro país, está libre de la enfermedad, sentiré orgullo de que mi nombre esté plasmado entre las listas innumerables de personas que dieron su disposición para luchar de frente a la pandemia.
“Esta mañana del Primero de Mayo fue bien diferente, pero no por diferente dejamos de conmemorar la fecha y darle la connotación que tiene. La mayor satisfacción que puede sentir un ser humano de estos tiempos es saber que en un momento de contingencia tan terrible como este dio su paso al frente y está en la primera línea de combate”.
Sin embargo, Nadiel no solo se levantó a trabajar este Primero de Mayo a la vera del peligro, sino que también levantó su voz para cantar, con el timbre que da la dignidad, el orgullo que siente por ser un trabajador cubano. En su garganta, además del tema “Te doy una canción”, sonó la definición que hiciera el Comandante en Jefe de lo que es Revolución, esa que el artista holguinera contribuye a levantar cada día con sus propias manos.
Material Relacionado
