Puerto Padre, Las Tunas.- El Control Sanitario Internacional, en puerto Carúpano, de siempre ha sido muy riguroso, pero ahora ante la Covid-19 en este, uno de los puntos de frontera de la provincia de Las Tunas, la exigencia trasciende y asume otros procederes que van más allá de los comunes.
Las operaciones comerciales no se detienen, es vital para la economía la importación y exportación. El arribo de un buque en las últimas horas pone a prueba lo descrito en planes de enfrentamiento al nuevo coronavirus.
Una de las embarcaciones de los prácticos de Puerto Padre traslada a un joven doctor y al funcionario del Centro de Higiene y Epidemiología; son los primeros en abordar el buque, con ellos el práctico, quien se encarga de la maniobra marinera. Los tres tienen una encomienda especial mar afuera.
Sus ocho años de ejercicio exaltan una misión en la República Bolivariana de Venezuela; pero el encargo de la travesía hacia el azul inmenso, el abordar el buque mediante escalera de gato, la aplicación de los test rápidos a la tripulación foránea, los consejos de la buena madre y las medidas de protección tienen una connotación mayor en su andar de médico.
Al hablar de su oficio precisa que se es práctico en un lugar específico por las características de las bahías de entrada a puertos.
Jorge Luis Betancourt, del Control Sanitario Internacional en el Centro Municipal de Higiene, Epidemiología y Microbiología, emprende la marcha, reconoce la responsabilidad contraída.
Mar afuera, Andy, Jorgito y Adel se unen en un desafío por la vida; como testigos, los tripulantes de la embarcación de los prácticos de Carúpano y el buque por trasladar al puerto.
En tierra todo un dispositivo aguarda por si es necesaria su colaboración. La operación es un éxito. Enhorabuena, los resultados de las pruebas rápidas son negativos.
Unas cinco horas más tarde atraca el buque en la Terminal de Embarque de Azúcar a Granel, los aplausos sellan la jornada. Andy Álvarez Reynaldo, Jorge Luis Betancourt y Adel Antonio Ramírez Blanes vuelven a casa, con cautela andarán estos días. Son hacedores de una historia que mar afuera garantiza la tranquilidad portuaria en sus operaciones comerciales.
HACER PORTUARIO EN CARÚPANO, UN HECHO
Jorge Mauteca Ramírez, director de la Unidad Empresarial de Base de Puerto Carúpano, declara que con extremo cuidado mantienen las operaciones comerciales. Por estas semanas incrementan las acciones que aseguran la entrada de alimentos y cemento, así como la exportación de azúcar y palanquilla.
Similares tareas de preservación centran las actividades mercantiles, comenta el directivo, quien argumenta que todos los trabajadores cuentan con medios de protección, desinfectante para las manos, y se rigen por protocolos del Control Sanitario Internacional.
El personal mayor de 60 años se acogió a las disposiciones sanitarias, por lo cual el resto del colectivo tiene la encomienda de las operaciones, que aseguran vitalidad económica para la provincia y el país. (Tomado de Periódico 26, Las Tunas)