La ciudad de Holguín, famosa por su Loma de la Cruz, sus numerosos parques y sus calles rectas “como tiradas a cordel”, llega hoy a su cumpleaños 300. La Covid-19 le ha arrebatado la oportunidad de celebrar, con bombo y platillo, el tan anhelado aniversario, sin embargo, entre los ojos de su gente ataviada con nasobucos es posible advertir el orgullo por pertenecer a este pedazo de tierra.
Pero si bien la pandemia impide que el pueblo holguinero se abrace este 4 de abril y celebre unido físicamente las tantas victorias acumuladas en 300 años bajo la condición de Pueblo, no ha podido frenar el ajetreo constructivo que avanza en el centro de la urbe para convertirla en una ciudad más culta, turística y universal.
Para homenajear a Holguín, con una población superior a los 300 mil habitantes, se han realizado desde el pasado abril mil 384 acciones constructivas, que representan alrededor del 85 por ciento de las obras previstas. La mayoría de esas intervenciones han beneficiado a instituciones estatales y al sector residencial, pero todas confluyen en el objetivo de dotar a la capital provincial de una mejor infraestructura y belleza.
De acuerdo con Héctor Lázaro Suárez, intendente del municipio de Holguín, “el Aniversario 300 no es más que un pretexto para hacer acciones por esta ciudad que queremos, y el hecho de que se involucrara la población ha sido un factor determinante para tener una ciudad más linda, más culta y más turística, como reza la campaña comunicacional”.
Hay que destacar que el empeño común ha hecho posible la belleza y funcionalidad que hoy habita en centros como la Secundaria Básica Abel Santamaría y la Escuela Especial la Edad de Oro, así como en el Hogar de Ancianos Pedro Vázquez y otras casas de abuelo y consultorios, por solo citar algunos ejemplos.
El funcionario señala también que “se trabajaron cinco arterias principales: “Morales Lemus”, “Máximo Gómez”, Aricochea, Avenida Los Libertadores y la Carretera Central. En ellas se ha laborado con integralidad. Se realizó limpieza de los tragantes, cambios de rejillas, reparación de registros, mejoras de las acometidas eléctricas y telefónicas, y reparación de aceras, contenes y alumbrado público”.
Todavía faltan por concluirse obras de impacto en el mismo corazón de la urbe, tales como la reanimación total del Boulevard y dos amplias instalaciones para la prestación de servicios, el centro recreativo “El Mestre” y el restaurante “El Cocodrilo”. Pero lo importante es que el trabajo creador a favor de Holguín no se detiene.
La Covid-19 impide celebrar como hubiese querido el pueblo holguinero, pero no evitará que los corazones latan juntos este 4 de abril y las buenas vibras se eleven hasta el “Cerro Bayado”, la universal Loma de la Cruz.