Ante la situación epidemiológica existente en el país por el coronavirus las entidades del sector de la construcción han adoptado medidas para reducir el riesgo de infección por la enfermedad.
Por ejemplo, en la Empresa de Construcción y Montaje (ECM) ubicada en la Zona Especial de Desarrollo Mariel la Dirección General y el Buró Sindical Especial hicieron un llamado a la conciencia y a la disciplina; exigen que cada trabajador cumpla con las normas de higiene establecidas, según informó Mayvelis Parés Menéndez, especialista en Comunicación.
Dio a conocer además, que se realiza la pesquisa activa por parte del Departamento de Seguridad y Salud del Trabajo, como método fundamental para la detección de síntomas.
En cada área accionan para minimizar los riesgos de contagio de la enfermedad, orientan sobre el lavado correcto de las manos y la separación requerida entre personas e insisten en el deber de informar oportunamente ante la presencia de cualquier señal asociada al nuevo coronavirus.
Es de estricto cumplimiento el uso del nasobuco para acceder al transporte obrero; no se permite el acceso a la entidad a trabajadores con gripe, secreción nasal, o afección respiratoria; fueron habilitados recipientes con la solución clorada para higienizar las manos en los puntos de acceso a las obras y las oficinas, y se adoptaron decisiones para evitar la aglomeración de personas.
Por otra parte, se analiza la posibilidad de aplicar la alternativa del trabajo a distancia o teletrabajo en algunas áreas.
Integrantes del Secretariado Nacional del Sindicato de Trabajadores de la Construcción (SNTC) comprobaron ayer in situ el cumplimiento de las medidas para evitar el contagio en esa importante empresa constructora.
Entre quienes visitaron la entidad estuvo Carlos Antonio de Dios Oquendo, secretario general de esa organización, quien elogió las medidas adoptadas y la conciencia de los constructores y del personal de apoyo para afrontar la pandemia.
La Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y los sindicatos siguen de cerca la materialización de las orientaciones dadas por las máximas autoridades del gobierno, a fin de evitar la propagación de la enfermedad denominada Covid-19.