El reinicio de la guerra por la definitiva libertad de la patria, acontecido el 24 de febrero de 1895 bajo el liderazgo de José Martí, fue evocado este lunes en la suroriental provincia de Santiago de Cuba, tierra en la que descansan los restos del Héroe Nacional y se ubica el poblado que dio nombre al grito de independencia o muerte: Baire.
En el Mausoleo erigido para honrar al Apóstol de nuestra independencia, ubicado en el cementerio patrimonial de Santa Ifigenia, fueron depositadas ofrendas florares a nombre del General de Ejército Raúl Castro Ruz, del Presidente de la República, Miguel Mario Díaz-Canel Bermúdez, del Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular Esteban Lazo Hernández y del pueblo de Cuba.
Del mismo modo, en el poblado de Baire, ubicado en el santiaguero municipio de Contramaestre, se celebró el acto nacional por el aniversario 125 del reinicio de la guerra por la independencia de Cuba, el cual estuvo presidido por Víctor Gaute, miembro del secretariado del Comité Central Partido Comunista de Cuba, además de las máximas autoridades políticas y gubernamentales de la provincia: Lázaro Expósito y Beatriz Johnson, respectivamente.
Al usar de la palabra Yoel Cordoví, presidente del Instituto de Historia de Cuba, evocó cómo se fraguó la materialización de aquella Guerra Necesaria organizada por Martí con el concurso de tantísimos patriotas dentro y fuera de Cuba.
“Ayer, hoy y siempre escucharemos el Grito de Baire con emoción y orgullo, conscientes de que, más que un hecho histórico aislado acontecido en una comarca, Baire rememora y sintetiza el grito de Cuba, el grito posible tras el fracaso de la Fernandina”.
Aseguró que “125 años después el pueblo de Baire sigue asomándose a la historia, escuchando sus latidos, al compás del sentimiento de libertad o muerte, de toda una Isla, de todos los cubanos”.
Como parte de la conmemoración de este épico suceso, y como ya es tradicional, a las 12 de la noche una representación del pueblo de ese poblado santiaguero entonó las notas del himno nacional y colocó flores ante el obelisco a José Martí en el parque central de dicha comunidad.
A las cinco de la madrugada retumbó en todo Baire la diana mambisa en recordación al alzamiento armado de aquel 24 de febrero de 1895, en tanto al filo de las nueve de la mañana, tras concluir el acto central por la efemérides, se peregrinó hasta el cementerio local.
Allí se depositaron flores ante las tumbas de protagonistas principales del Grito de Baire cuyos restos mortales descansan en ese camposanto: el mayor general Jesús Rabí, el Mayor General Florencio Salcedo, el Coronel Juan Joaquín Urbina y el General Saturnino Lora.
