Lázaro Rondón Hernández, de Pinar del Río, nos cuenta lo que vivió el 7 de enero antes de abordar el tren Holguín-La Habana en el horario de las nueve y treinta de la noche.
“Me llamaron la atención tres cosas: la amabilidad de todos sus trabajadores, el excelente servicio del baño público, caracterizado por su higiene, y el aprovechamiento de la jornada laboral de la compañera que mantenía la limpieza como si se tratara de su casa.
“Desconozco cuál era su salario, pero ojalá le paguen bien para que siga comportándose así”.
Confirmo lo que dice lázaro yo lo pude apreciar. Felicidades al colectivo.