“El equipo nacional tuvo un entrenamiento muy completo en Kazajstán por las excelentes condiciones de la Academia Mundial que existe en Almaty. Es un centro que goza de todos los requisitos, alojamiento, alimentación, áreas de entrenamiento tanto para la preparación física como la del boxeo en específico, sin olvidar que la altura de 1 600 metros sobre el nivel del mar garantizó la concentración total de los atletas”, afirmó Alberto Puig de la Barca, presidente de la Federación Cubana.
El directivo aseveró que la visita de la selección patria fue aprovechada también por otros conjuntos.
“Estuvo la principal formación kazaja, la que ganó el Mundial de Rusia. Se incorporó a la preparación Hungría y Japón, ambos con sus mejores exponentes. Eso permitió sparrings de calidad. Sin duda para la etapa actual de preparación todo salió de maravillas”.
Sobre la incursión de Arlén López y Julio César la Cruz en las divisiones de 81 y 91 kilogramos, respectivamente, en el preolímpico de Argentina en marzo fue claro.
“Son dos púgiles con varios años de trabajo. Les costaba mucho hacer el peso, de ahí que decidimos sus ascensos. Se ven más fuertes. Arlén lució en gran forma ante el campeón del orbe de Kazajstán en el entrenamiento y Julio cada vez luce mejor”.
La intención de capturar todos los boletos rumbo a Tokio 2020 no escapó del diálogo.
“El sorteo será vital. En el continente hay púgiles de mucho nivel. La idea es que se logren la totalidad de los pasaportes en Buenos Aires. De no conseguirse lo intentaremos en el clasificatorio mundial de París”.
En casa la acción no se detendrá. Solo así la cantera gozará de buena salud.
“A nivel doméstico en marzo se iniciarán los zonales de la Serie Nacional. En la final, que se realizará en Camagüey en mayo, incursionarán los números uno de cada división junto a las segundas figuras. También en la Copa Teófilo Stevenson estarán los mejores. Es el mejor homenaje a un grande del boxeo cubano y mundial”, afirmó Puig de la Barca.
