“El taekwondo ha trazado dos rutas críticas hacia los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Una está enfocada en nuestro principal atleta, Rafael Alba, quien podría lograr una medalla en esa cita”, afirmó Iván Fernández, Comisionado Nacional de ese deporte en nuestro país.
“La idea de este primer trimestre es lograr que se mantenga entre los dos primeros del ranking mundial, para que en el sorteo clasificatorio rumbo a Japón en Costa Rica pueda tener cierta comodidad a la hora de enfrentar a los rivales. Luego asistirá a una base de entrenamiento en España. De ese país partiría a una serie de torneos del circuito europeo de mucha importancia, por la cantidad de puntos que dan”.
“La segunda ruta crítica fue aprobada recientemente por la dirección de Alto Rendimiento y el Comité Olímpico Cubano. Involucra al resto de los muchachos que tratarán de incluirse en la cita de los Cinco Aros. Ellos también competirán en la capital costarricense en busca de su boleto. La tarea se anuncia complicada, pues en nuestra aérea el nivel ha subido muchísimo”, aclaró.
El federativo recordó que esta disciplina cada día se complejiza más en el apartado tecnológico.
“La tecnología se actualiza cada año. Es una amenaza para naciones como nosotros cuya economía sufre muchos obstáculos por el bloqueo estadounidense. Esto sin lugar a dudas nos golpea, nos deja huellas peligrosas. Influye en la preparación, pues uno debería entrenar del modo en que compite. Acá se complica el asunto, pues no tenemos los sensores y el resto del equipamiento que mide importantes parámetros del entrenamiento y el rendimiento”.
Aclaró que Cuba cuenta con el dinero para acceder a esa tecnología, más los tentáculos del cerco económico, financiero y comercial nos lo impide.
“No podemos realizar la transferencia bancaria que nos permita que determinados proveedores nos faciliten el producto. A la Federación Internacional se le hace difícil lograrlo sin que el gobierno de Estados Unidos los sancione. Ello nos ha obligado a un gasto mayor a la hora de trazar la estrategia competitiva”.
Aseveró Fernández que en febrero se realizará el Campeonato Nacional en Camagüey. La idea es lograr que sea un éxito total.
“Queremos lograr un buen espectáculo. Realizar como una especie de Grand Prix. Se peleará en las categorías mundiales, pero luego las mezclaremos solo con los primeros lugares. Así se combatirá más, y con mayor calidad. Habrá mucha rivalidad y dará una idea de las figuras que el futuro podrían representarnos internacionalmente”.
El especialista dijo que se luchará por clasificar hacia la cita japonesa más efectivos que en Río de Janeiro 2016.
“Existen posibilidades de incluir más figuras, incluidas mujeres, que no incursionaron en Brasil. Hemos estudiado los escenarios posibles y es factible lograrlo. Si se consigue, será un éxito. Ya en la competencia lucharemos por llegar lo más lejos posible. En Tokio 2020, diremos presente”, certificó.
