Trabajar con creatividad en la búsqueda de soluciones ante las limitaciones de recursos, e incentivar la participación de los trabajadores en la aplicación de reservas productivas al interior de los colectivos para crecer en la elaboración de alimentos, constituyen acciones que enrumban el accionar de los afiliados al Sindicato de la Industria Alimentaria y Pesca (SNTIAP) en Sancti Spíritus.
Esa proyección de trabajo se remarcó en las intervenciones de los dirigentes sindicales de ese gremio durante el balance anual de la organización sindical en el central territorio, donde se convocó, además, a exigir por el estricto cumplimiento de la disciplina laboral y tecnológica, en cuanto al aprovechamiento de la jornada laboral y la organización del trabajo.
En el encuentro, se llamó a la vigilancia en el cumplimiento de los índices de consumo, los rendimientos y el aprovechamiento óptimo de las materias primas, fortaleciendo los encadenamientos productivos que posibiliten presencia de ellas, como una vía real de sustituir importaciones.
En el centro del análisis, estuvo la insuficiente exigencia sindical ante el trabajo que deben desplegar las empresas productoras de alimentos para la implementación de los sistemas de gestión de la calidad e inocuidad, aspectos donde aún se detectan dificultades en áreas como el etiquetado de los productos, violaciones en normalización y metrología, así como de prácticas higiénico sanitarias en toda la cadena productiva.
Durante el 2019, en el territorio espirituano se puso en funcionamiento una nueva línea de fabricación de galletas dulces, una moderna fábrica de perros calientes y una planta de conformados para productos del mar, de conjunto a una red de casillas especializadas para su comercialización directa a la población.