La Central de Trabajadores de Cuba (CTC), de manera conjunta con los sindicatos nacionales, convocan a realizar durante los meses de enero y febrero al análisis en los colectivos laborales, con el objetivo de lograr el compromiso de los trabajadores respecto al cumplimiento del plan de la economía para el 2020, teniendo en cuenta las restricciones que sin duda prevalecerán.
Lo anterior fue anunciado por el diputado Ulises Guilarte De Nacimiento, secretario general de la CTC, durante los debates que propiciaron la presentación del Plan de la Economía y la Ley del Presupuesto del Estado para el 2020, las cuales estuvieron a cargo de los ministros de Economía y Planificación y Finanzas y Precios, Alejandro Gil y Meisi Bolaños Weiss, respectivamente.
El también miembro del Buró Político expresó que en este ejercicio se necesita la máxima integración y acompañamiento de las direcciones administrativas para presentar informes con contenidos que precisen las potencialidades y reservas dirigidas a encontrar fórmulas y superar dificultades.
Insistió en la necesidad de explicar que de todo ello depende alcanzar una mejor calidad de vida. Lo primero es generar la riqueza para después poderla distribuir. Y eso hay que hacerlo con los trabajadores y campesinos.
“Hay que escuchar las propuestas de los trabajadores y tener la capacidad de encausarlas, dando a ellos mismo el ejercicio de participación”.
Agregó que de la economía depende que continúen trabajando las fábricas, los talleres. “Este año hemos tenido más de 46 mil trabajadores interruptos, varias de nuestras industrias han tenido que reducir los niveles de actividad y algunas se han paralizado totalmente. Es la manera de defender el empleo, el mejoramiento de los ingresos, y también las prestaciones sociales que nuestro proyecto social defiende en función de los trabajadores”.
Las leyes que se nos han presentado —consideró— identifican con suficiente precisión el complejo escenario que presentará la economía el próximo año, con desafíos a sus dos principales actores (es decir, la empresa estatal socialista y las formas de gestión no estatal), para de conjunto superar las deficiencias afrontadas en el 2019.
Agregó que cualquier análisis siempre tendrá en cuenta la escalada injerencista del gobierno norteamericano y el recrudecimiento del bloqueo, que impacta de manera inevitable en varias aristas de nuestra economía.
No obstante, afirmó que el principal esfuerzo hay que dirigirlo al cumplimiento de los ingresos, con prioridad para que aquellos que provienen de las exportaciones, así como los tributarios.
Dijo que ello condicionará cualquier demanda de recursos financieros o materiales para respaldar los programas prioritarios (dígase combustible, alimentos, pago de deudas o asignación de recursos primarios a la economía). A su vez, es también la fuente para respaldar gastos y prestaciones sociales a los trabajadores, como es el caso de las pensiones.
Comentó que este año las exportaciones reflejan incumplimientos y varios renglones tradicionales no logran los niveles de ingreso planificados, en tanto para el 2020 los que se abren son pocos, en comparación con las potencialidades reales de los territorios.
Los ingresos al presupuesto del estado —manifestó—se han visto afectados básicamente por el incumplimiento del plan de circulación mercantil, que como señaló la Ministra de Finanzas y Precios supera hoy los dos mil 300 millones. “Hay que recordar que esta es la fuente principal para el suministro de bienes y servicios a la población, y además, es la fuente para alcanzar el equilibrio financiero del país”.
Teniendo en cuenta los desafíos para el próximo año, señaló la necesidad de lograr un incremento de las ofertas como vía principal para recaudar ingresos.
Se refirió a las insuficiencias que todavía prevalecen en el sector empresarial y explicó que al cierre de noviembre más de 90 empresas acumulaban pérdidas en sus estados financieros.
“En muchas de ellas persisten los problemas con la contabilidad, el control de los recursos, la cadena de impagos, y no está solucionado el vergonzoso asunto del robo y la corrupción, a lo que también hay que sumar la evasión fiscal que todavía predomina como un asunto no resuelto”.
En tal sentido, resaltó la responsabilidad de la CTC y los sindicatos, y su papel movilizador para maximizar procesos que dinamicen la economía y destraben el desarrollo de las fuerzas productivas.
Consideró que se trata de un plan lleno de tensiones. Cumplirlo y crecer, aunque sea de manera modesta, será el mayor y mejor aporte a la satisfacción de las demandas de nuestro pueblo y a la gradual consolidación del proyecto social que nosotros mismos hemos acordado construir, destacó.
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