Desde hace varios años el cine latinoamericano conoce un verdadero boom femenino que implica no solo el número de realizadoras, con obras valiosas, sino el mal llamado sexo débil como sujeto. Sus áreas laborales, dramas personales y familiares constituyen algunos de los sujetos.
El realizador Franco Lolli ha mezclado estos y otros personajes que se desenvuelven en situaciones complejas para discursar en torno a varios ítems de gran interés, que imbrican vidas privadas con aspectos sociales peliagudos que vive ahora mismo Colombia, como la justicia y el mundo de los abogados, y lo ha hecho con una decorosa factura en un filme que atrapa la atención e incorpora al espectador desde sus minutos iniciales.
Tres Veroes, de la conocida cineasta brasileña Sandra Kogut (Mutum, Campo grande…) sigue a una excéntrica empleada doméstica indirectamente afectada por la famosa Operación Autolavado, quien sirve a una familia rica de Río de Janeiro, cuyos miembros pronto figurarán en la lista de los malversadores más buscados del país. Como indica su título, la película transcurre durante tres veranos, concretamente en vacaciones navideñas, al tratarse del hemisferio sur.
Pero el filme padece de una molesta indefinición tonal, indeciso ante la comedia o el drama, sin que logre resolver la manera en que abordará los conflictos, algo que sufre también la caracterización de varios personajes, y que tampoco acusa un montaje precisamente satisfactorio, siendo por la propia estructura fílmica un rubro tan importante.
En realidad lo que motiva es la interpretación protagónica de esa gran actriz nordestina llamada Regina Casé.
