La propuesta, presentada en la página digital del aspirante a la Casa Blanca, plantea detener la separación de familias migrantes en la frontera sur, una práctica que generó fuertes críticas bajo el ejecutivo del republicano, y revertiría las restricciones de viajes impuestas contra ciudadanos de países de mayoría musulmana.
Su iniciativa también restablecería la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, un programa creado durante la administración de Barack Obama (2009-2017) para proteger de la deportación a jóvenes indocumentados traídos a este país durante su niñez, el cual Trump decidió eliminar.
‘Como presidente, Biden comprometerá un importante capital político para finalmente llevar a cabo una reforma legislativa de inmigración destinada a garantizar que Estados Unidos permanezca abierto y acogedor con las personas de todas partes del mundo’, indicó la campaña del exvicemandatario.
En un país donde se estima que viven 11 millones de indocumentados, uno de los puntos del plan comprende trabajar con el Congreso en la creación de una hoja de ruta clara hacia el estatus legal y la ciudadanía de los que se registren, estén al día con sus impuestos y hayan pasado una verificación de antecedentes.
Asimismo, la propuesta aumentaría el límite anual de admisión de refugiados en Estados Unidos de los 18 mil actuales a 125 mil, entre otras medidas.
Biden, quien se mantiene al frente de los 15 precandidatos demócratas que buscan la nominación del partido de cara a las elecciones presidenciales de noviembre de 2020, enfrenta escrutinio de los grupos de defensa de los inmigrantes sobre su papel en las políticas de la administración de Obama que llevaron a un gran incremento de las deportaciones.
En ese sentido, el plan dado a conocer hoy sostiene que el exvicepresidente comprende el dolor de todas las familias que han tenido un ser querido retirado del país, incluso bajo la administración Obama-Biden, y cree que debe actuar mejor.
Sin embargo, sus propuestas en materia migratoria no van tan lejos como las de los senadores progresistas Bernie Sanders y Elizabeth Warren, sus perseguidores inmediatos en las encuestas, ni las del exsecretario de Vivienda Julián Castro.
La iniciativa, por ejemplo, no comprende una despenalización de los cruces fronterizos no autorizados, algo que sí apoyan esos aspirantes a la mansión ejecutiva.
Además, aunque Biden quiere aumentar las protecciones para los inmigrantes indocumentados que denuncian violaciones laborales, no llega al punto del plan de Sanders, quien quiere impulsar el poder de negociación para esos trabajadores.
(Tomado de PL)