“El puerto tiene que funcionar como un reloj”, afirmó el Vicepresidente cubano, Salvador Valdés Mesa, el evaluar las operaciones y capacidades de almacenamiento en Cienfuegos y recorrer entidades que han ejecutado o realizan inversiones estratégicas para la economía del país.
En la terminal de embarque de azúcar a granel Tricontinental, en funcionamiento desde el año 1967, el también miembro del Buró Político del Comité Central del Partido Comunista de Cuba (PCC), se reunió con directivos de la Empresa de Servicios Portuarios del Centro y con los de la unidad empresarial de base (UEB) Cereales, responsabilizada con el suministro de harina de trigo a los territorios desde el cienfueguero hasta el holguinero, y cuya planta principal ejecuta una inversión que ha estado caracterizada por múltiples tropiezos y problemas.
Durante los análisis Valdés Mesa estuvo acompañado por Jorge Luis Tapia Fonseca, vicepresidente del Consejo de Ministros; Iris Quiñones Rojas, ministra de la Industria Alimentaria, y Julio García Pérez, presidente del Grupo Empresarial Azucarero Azcuba; así como por Félix Duartes Ortega, primer secretario del PCC en Cienfuegos, y Mairelys Pernía Cordero, presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular.
Explicaron que la terminal de embarque tiene capacidad para recibir 500 toneladas por hora. En la zafra pasada operaron en ella y exportaron 224 mil 600 toneladas de azúcar. Actualmente preparan todo el equipamiento para afrontar la próxima campaña, la cual está a punto de comenzar. Directivos de esa entidad precisaron que el próximo día 15 los componentes requeridos para garantizar las operaciones deben quedar listos y que las condiciones generales son mejores que en años anteriores.
Salvador Valdés Mesa insistió en los problemas que se afrontan con la capacidad de almacenamiento. Al respecto le explicaron que uno de los almacenes, con capacidad para 90 mil toneladas, presenta un deterioro notable en el techo, lo cual atenta contra la calidad del azúcar. Esa dificultad debe quedar resuelta con la próxima llegada al país de las planchas de zinc necesarias.
El Presidente del Grupo Empresarial Azcuba agregó que entre los proyectos figura mejorar la infraestructura, garantizar la inocuidad del azúcar y crear mayores capacidades de almacenamiento para ingresar divisas a la economía del país por esa vía.
Sobre la producción cañera y azucarera, el Vicepresidente de la República de Cuba insistió en el requerimiento impostergable de recuperarla, sin tener que esperar al año 2030, según lo establecido en el programa de desarrollo.
También insistió en la calidad del producto terminado, que en ocasiones se pierde mucho dinero por incumplimientos de parámetros cualitativos, pues hay países muy exigentes al respecto.
Ganar en tiempo
Sobre la inversión que se ejecuta en la planta productora de harina de trigo, administrada por la UEB Cereales Cienfuegos, fue informado que se inició en el año 2014 y que cuenta con un monto total de unos 15 millones de pesos.
Los problemas presentados han sido múltiples y numerosos, sobre todo por falta de previsión de los inversionistas y proyectistas.
El propósito es terminar la ejecución en junio del próximo año, lo que favorecerá la producción y mejorará el abastecimiento a las provincias desde Cienfuegos hasta Holguín.
Esa es una de las obras más importantes que ejecuta el sector de la Industria Alimentaria en el país, acentuó Jorge Luis Tapia, y argumentó que cuando se viola lo establecido en la Ley de Inversiones ocurren los problemas afrontados en la planta cienfueguera, que se han debido, fundamentalmente, a la falta de previsión.
Salvador Valdés Mesa apuntó que debe ganarse tiempo en la ejecución de las inversiones vinculadas a las operaciones portuarias de carga, descarga y almacenamiento, pues la economía cubana no está en condiciones de pagar estadías a los barcos, y subrayó que la correspondiente a la planta de Cienfuegos tiene carácter estratégico por el alcance e importancia de su producción. En tal sentido indicó mantener un control riguroso de su realización y de la solución de los problemas.
El Vicepresidente cubano visitará también la nueva y moderna planta de fertilizantes denominada NPK (Nitrógeno, Fósforo y Potasio), puesta en marcha recientemente, y la destilería de alcohol reactiva en el batey del central Antonio Sánchez, en el municipio de Aguada, la cual es administrada por la empresa mixta cubano ─ española Alficsa. S.A. Tiene previsto además, reunirse con directivos del sector azucarero en esa provincia.