Este martes (10:00 de la noche, hora de Cuba) se romperá la espera en cuanto al debut de nuestra escuadra nacional en el torneo Premier 12. Contra Canadá se jugará prácticamente el pase a la siguiente ronda, y aunque el tunero Carlos Juan Viera parece ser el encargado de lanzar los primeros strikes, la utopía de Miguel Borroto y sus muchachos es batear, producir carreras y quitarnos de encima las últimas derrotas contra los norteños desde el 2015.
Una presumible alineación pudiera ubicar, atendiendo a lo visto en los topes de preparación, a Roel Santos (cf), Alexander Ayala (3b), Yurisbel Gracial (rf), Alfredo Despaigne (bd), Frederich Cepeda (lf), William Saavedra (1b), Yosvani Alarcón (c), Erisbel Arruebarruena (ss) y César Prieto (2b), con algún que otro cambio en el orden o la entrada de Yordanis Samón o Pavel Quesada como titulares.
Frente a Australia el miércoles (también 10:00 de la noche, hora nuestra) y Corea el viernes (5:00 de la mañana) volveremos a estar atentos a cada lanzamiento, swing, fildeo y corrido de las bases. Una pregunta ronda hoy a muchos aficionados, sobre todo tras la última derrota con Venezuela 12-6, quizás la más preocupante de las dos que sufrimos en suelo taipeiano. ¿La entrada de Yurisbel Gracial, Alfredo Despaigne y Liván Moinello aportará al equipo todo lo necesario para vencer, o al menos avanzar a la Súper Ronda del torneo más fuerte después de los Clásicos Mundiales?
Nada es tan mágico como se piensa, aunque la experiencia acumulada de ese trío puede insuflar una energía ganadora necesaria, tal y como hicieron con los Halcones de Softbank en el triunfo este 2019 de la Liga Profesional Japonesa.
Finalmente, dejamos claro que incluirse en la segunda instancia del Premier sería un éxito y techo supremo para el béisbol cubano hoy. No estamos aptos para obtener el cupo olímpico de América, palabra mayor por la que tendríamos que seguir trabajando a ver si pudiéramos conjugarla en los preolímpicos de América (marzo del 2020 en EE.UU.), o mundial (abril del 2020 en Taipei de China).
Un poco más adentro y a la par con la lid asiática, nuestra Serie Nacional vive una intensidad no menos interesante. Matanzas sigue siendo la única invicta desde la toma de los refuerzos (seis sonrisas al hilo); Camagüey ha sobrevivido tempestades desde el trono (a pesar de no tener su mentor titular y cuatro peloteros clave); mientras Santiago de Cuba e Industriales son caras inexpresivas después de los 45 primeros juegos con pálidas demostraciones y cuatro y cinco fracasos, respectivamente.
Por cierto, Avispas y Leones escenificarán un duelo este fin de semana (8 al 10 de noviembre) en el Latinoamericano que promete tensiones y público por miles, sobre todo porque los indómitos barrieron a los ahijados de Rey Vicente Anglada en la primera fase y la revancha pulula en la mente de los seguidores azules.
Queda camino todavía, pero los tropiezos iniciales no dejan mucho tiempo de recuperación. El pitcheo, en sentido general, anda lastimado y los cocodrilos yumurinos son los únicos que andan de maravillas con el madero, desde el box y, sobre todo, desde la defensa con un astronómico promedio de 986, algo inusual en la pelota cubana desde hace varios años.
Son tiempos de reacción para cada uno de los conjuntos con pretensión de llegar a los play off. Menos errores arbitrales también se imponen para no dañar el espectáculo. La semana será vital para nuestra pelota. Vivámosla.
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