“El pasado viernes 13 de septiembre mi niña de seis años tuvo una consulta en el Hospital Pediátrico de Centro Habana, cuando salimos y cerca del Ministerio de Energía y Minas ella me dice que no aguantaba más los deseos de orinar.
“Como estaban limpiando espero un minuto y cuando me dirijo a la compañera, ella en muy mala forma pregunta si no veo que está limpiando. Al instante el custodio me dice también de muy mala forma que no me quedara ahí, que el baño estaba al final del pasillo. Que me fuera porque eso estaba lleno de cámaras y yo no pertenecía al organismo.
“¿Acaso está prohibido pasar al baño de una entidad x cuando se necesite? Mi niña dijo que ese hombre era malo y que debían botarlo.
“En la otra puerta se encontraban dos compañeras y les pido que me dejaran pasar a la niña, una de ellas la tomó por el brazo y la llevó al mismo baño donde antes no me habían dejado llegar.
“¿Cómo pueden existir personas tan indolentes?”.
