Porque fue de los primeros atrevidos que sugirió crear un espacio que divulgara la obra del Poeta Nacional de Cuba; porque ha sido un ferviente divulgador de las esencias de ese autor y porque por derecho propio le tocaba, ya que esa también es su casa, la Fundación Nicolás Guillén le entregó la condición de miembro de honor a Luis Álvarez Álvarez, Premio Nacional de Literatura 2017.
Este camagüeyano, en sus más de 50 libros y 70 ensayos publicados, tiene como protagonista, en la mayoría, al autor de Sóngoro Cosongo: “La presencia de Luis como estudioso de Guillén es notable y muy importante para la fundación. Ha sido de los principales impulsores de llevar la obra guilleniana a las nuevas generaciones, y de estudiar y mostrar sus diferentes aristas”, aseguró Denia García Ronda, directora de estudios de la organización.
La Sala de Conciertos José Marín Varona, en la ciudad de Camagüey, acogió la entrega del reconocimiento que, además, contó con la presentación de textos reeditados de Nicolás Guillén.
Para Luis Álvarez fue un momento emotivo porque durante años estuvo estudiando al poeta y porque siempre ha sentido que “la divulgación de su legado es lo más importante. Guillén es uno de esos pilotes de mar y tierra que sostienen muelles. Y en estos tiempos tan complejos no nos podemos enfocar en las tablas que se pueden cambiar, sino en los pilotes. Eso es lo que hay que rescatar”.
