Los pinareños tienen un serio reto por delante: cumplir el plan anual de construcción de viviendas. Y la realidad, especialmente en las semanas más recientes, evidencia que “van con todo” en aras de cumplir ese compromiso de tanta significación social para las muchas familias necesitadas.
Una iniciativa de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC) y el Sindicato Nacional de la Construcción (SNTC) ha sido la organización de una Brigada de Trabajo Socialista (BTS) formada por 45 técnicos y obreros, entre albañiles, carpinteros, soldadores, plomeros…, procedentes de diferentes sectores de la producción y los servicios.
En el céntrico parque José Martí, de la capital de esa provincia, fue abanderado el colectivo en acto que contó con la presencia de Carlos Antonio de Dios Oquendo, secretario general del SNTC; y Rubén Lloga Sixto, máximo dirigente de la CTC en Vuelta Abajo. De inmediato sus integrantes comenzaron a laborar en un edificio de 30 viviendas en la zona conocida por Micro 5.
Lloga Sixto explicó a Trabajadores que del programa anual, ascendente a 3 mil casas, están terminadas algo más de mil 340, y que el propósito es construir 300 al mes hasta finalizar el año 2019. Agregó que existe la intención de conformar una BTS en cada municipio de Vuelta Abajo.
Pedro Ascuí Gavilán, jefe del colectivo de ejecución en la llamada Zona Pinar, explicó que laboran unas 10 horas diarias, y todos los sábados y domingos. “Hasta el momento no hemos tenido problemas con el suministro de materiales y es buena la atención a los hombres”, señaló.
Uno de los incorporados a la BTS es Idael Pérez Remis, del Sindicato de Trabajadores Civiles de la Defensa, quien labora en la Región Militar de Pinar del Río. “Estoy aquí de ayudante y permaneceré mientras sea útil”.
Alían Alazar Vázquez, miembro del buró provincial del SNTC, precisó que los integrantes de la BTS reciben el apoyo de movilizados voluntarios, y puntualizó que el objetivo es terminar el edificio a finales del presente mes.
Entre los miembros del colectivo hay trabajadores verdaderamente consagrados. Uno de ellos es Roberto Vargas, quien con 70 años de edad, se ocupa de las gestiones de transportación. “Aquí todo tiene que ser para el frente de acción, con el empeño de avanzar lo más posible y cumplir el compromiso”, afirmó.
Carlos Antonio de Dios Oquendo expresó que el Sindicato de Trabajadores de la Construcción tiene diseñado un movimiento llamado Con todos y para el bien de todos, vinculado al programa de la vivienda.
Entre sus especificidades se encuentran varias direcciones, como la incentivación de la disposición popular de trabajar voluntariamente y apadrinar las obras; organizar a los trabajadores no estatales, técnicos, especialistas e innovadores y racionalizadores en los Consejos Populares, y desarrollar una emulación que involucre a todos, estimule y reconozca el esfuerzo y los resultados.
Indicó además que también figuran el establecimiento de un sistema para propiciar la cultura del detalle y el buen gusto en los centros de producción de materiales de la construcción, y disponer del diagnóstico de las viviendas y células básicas en cada Consejo Popular para garantizar el apoyo.
Cuando estábamos a punto de cerrar estas líneas, conocimos a través de Lifer Félix Vázquez Cejas, secretario general del buró provincial del SNTC en ese territorio, que ya habían terminado la primera vivienda de las 30 que tendrá el edificio en Micro 5.
Sencillamente, el techo para las familias necesitadas no puede esperar. Y de eso los pinareños han hecho una convicción.
El fondo habitacional de nuestro país es de 3 millones 824 mil 861 viviendas, actualizado por el Censo de Población y Viviendas del año 2012 y la evolución del fondo con cierre en junio del 2017.
El 39 % se encuentra en regular y mal estado técnico. De Tipología I son 1 millón 956 mil 329 viviendas (51 %) y con cubierta ligera, 1 millón 868 mil 532 (49 %).
En el fondo precario existen 9 mil 823 cuarterías y ciudadelas, con 84 mil 452 viviendas; 117 mil 775 pisos de tierra y se han contabilizado 854 edificios críticos, de estos 696 en la capital con 6 mil 960 apartamentos y un total estimado de 849 mil 753 personas afectadas.
El déficit habitacional asciende a 929 mil 695 viviendas. De estas, nuevas a construir son 527 mil 575 y a rehabilitar, 402 mil 120. I Tomado de la Política de la Vivienda en Cuba