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Nadie nos va a amargar la vida

"Ningún enemigo de la Revolución cubana podrá arrebatar el bienestar de mi familia...", declaró Obdiel Torres Guevara, maestro en el municipio avileño de Morón. | Foto: José Luis Martínez Alejo
«Ningún enemigo de la Revolución cubana podrá arrebatar el bienestar de mi familia», declaró Obdiel Torres Guevara, maestro en el municipio avileño de Morón. Foto: José Luis Martínez Alejo

La familia de Obdiel Torres Guevara no está triste ni acobardada. Otra vez se atrinchera para resistir frente al criminal bloqueo yanqui. Empuña como poderosa arma para alcanzar una nueva victoria, la convocatoria a ser más creativos, ahorrativos, eficientes y solidarios, realizada en la Mesa Redonda de la Televisión Cubana, por Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, a raíz de la baja disponibilidad de diésel para las actividades de la economía y los servicios.

«Tal como dijera nuestro Presidente, ante esta situación coyuntural que vivimos, no nos vamos a amargar la vida, ni nadie nos quitará el sueño, porque, como él afirmara, el pueblo cubano seguirá siendo feliz, laborioso, creativo, alegre e, incluso, bromista en las situaciones más apretadas y complejas», subrayó el maestro de 30 años de edad, de la escuela primaria Ignacio Agramonte, del municipio de Morón, en la provincia de Ciego de Ávila.

El también estudiante del 4to.  año de la carrera de Licenciatura en Educación Primaria, respaldó las palabras del mandatario cubano, sobre la potencialidad con que cuenta el país con su magnífica juventud. «Los jóvenes somos continuidad de la Revolución, por lo que el Gobierno puede contar con nuestro apoyo para seguir construyendo el futuro de la patria; nosotros somos Fidel.

«Que cuál sería la respuesta concreta de los educadores en estos momentos, pues el espíritu renovador, el uso óptimo de los materiales escolares, la innovación y la transmisión de conocimientos a los niños, a los jóvenes y a la familia. Además de un eficiente trabajo político e ideológico, ya que los enemigos internos tampoco lograrán confundir a nuestro pueblo».

El joven historiador, quien se prepara para participar en la venidera edición del Encuentro Nacional de Patrimonio Histórico Azucarero, apoya de forma incondicional las medidas adoptadas en Cuba para mitigar los efectos de la actual situación energética, pues confía en que nada podrá apagarle la sonrisa a su familia, especialmente a su niña Dalena, a su hijo Daliexkys y a su esposa Dayana Concepción.

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